La educación marca el futuro de los países. Un área que genera el 20 % de la inversión tecnológica en España, abarcando un mercado que supera los 10 millones de usuarios. El canal no es ajeno a esta oportunidad, y tampoco a la enorme responsabilidad que implica; y así quedó reflejado en E-Ducando, un evento organizado por Esprinet, que contó con el sí de 20 fabricantes y cerca de 150 clientes. “La educación no es hoy importante; lleva muchos años siéndolo”, apuntó José María García, country manager de Esprinet Ibérica. Consagrada, desde hace tiempo, como un vertical clave en el negocio del mayorista, García se refirió al papel esencial que tienen las TIC en el objetivo de convertir el aula en un entorno “atractivo y que enganche a los alumnos”. El country manager está convencido de que ya estamos inmersos en una nueva era en materia educativa. “Vamos a coger un ritmo muy alto”, insistió; alcanzando a todos los colegios, privados, concertados o públicos. “La cultura es universal y todos los centros conseguirán este ritmo”.
Las TIC, habilitadoras de la educación
No es un mercado fácil, por el alto grado de especialización y conocimiento que exige a los distribuidores, pero sí muy rentable. Y, sobre todo, enormemente gratificante. Carlos Alonso, director del negocio de educación en HP, aseguró que ya hay algunos colegios que cuentan con un proyecto educativo, potente, en el que saben qué papel juega la tecnología. Ahora bien, reconoce que hay otros que todavía están determinando cuál es su propuesta. “Hay muchísimo por hacer”, reconoció. “Que los fabricantes y los distribuidores seamos especialistas en el mercado de la educación puede aportar muchísimo a los centros educativos”, explicó. Ahora bien, cuando un centro diseña su plan educativo, tiene que tener en cuenta que “no todos los ordenadores son iguales, ni todos los distribuidores son iguales: hay que apoyarse en integradores que sepan de educación”.
Javier Vivas, senior education consultant de New Line, apuntó que, entre otros factores, la conectividad ha sido un factor favorecedor del desarrollo de las TIC en las aulas. “Cada vez hay más dispositivos y más tecnología en las aulas”, reconoció. “Los colegios buscan soluciones, cada vez más, para afrontar de manera adecuada el proyecto educativo”.
Los centros con una vocación de formación profesional exhiben una buena hoja de ruta. Jaume Carne, senior regional manager de Iberia de Wacom, explica que hay centros que tienen muy claro qué está demandando la industria, “ajustando, por tanto, su proyecto educativo, para formar a sus alumnos en esa dirección”. Es el caso, por ejemplo, de centros vinculados con la ingeniería, el audio vídeo en 3D o el diseño.
Analizando la implantación de las TIC en los proyectos educativos que existen en España en relación con los países de su entorno, Ovi Barceló, responsable de soluciones de educación de Microsoft en Europa Occidental, asegura que España estaría “a mitad de tabla”. En el lado de los elementos positivos, señaló el alto conocimiento que tenemos en transformación digital. “En España contamos con unos partners y unos equipos de trabajo con un nivel de conocimiento por encima de muchos países”. Aunque siempre se apunte al nivel educativo que exhiben, por ejemplo, los países escandinavos, Barceló asegura que allí se sigue “moviendo cajas”. “Se trata de partners con un mero perfil transaccional que no dan ningún valor a la educación”.
Panorama político
El panorama político que tiene España, coincidieron los representantes de los fabricantes, no es el mejor dinamizador de la educación. “Todos los cambios políticos han provocado que muchas Comunidades Autónomas estén con el freno de mano echado; lo que provoca que muchos colegios estén un poco perdidos”, apunta Alonso. “Y los fabricantes y el canal les podemos ayudar”.
La disparidad del mapa administrativo de España, con 17 Comunidades Autónomas y 2 Ciudades Autonómicas, añade un plus de complejidad. A juicio de Javier Martín, responsable del negocio de educación en Lenovo, País Vasco, Navarra y Cataluña, han sido, un año más, las que comunidades que más han invertido en educación en el último ejercicio. Confía, una vez pasadas las citas electorales, que la inversión aumente en el último tramo de este año en el resto de comunidades.
Ahora bien, esta descentralización no es un rasgo distintivo de España. Barceló recordó que en Finlandia, Noruega o Dinamarca hay 300 o 400 regiones, “cada una de ellas con un proyecto diferente”. Ahora bien, con lo que sí cuentan, a diferencia de España, “es con un proyecto educativo común, un pacto de Estado, del que aquí carecemos”. Eso sí, hay países, como Austria, donde, por ejemplo, se decide que hay que surtir de tabletas a todos los colegios, y cuando “observas el proyecto educativo, no hay muchos cimientos”.
Papel del canal: pocos pero buenos
El canal que se atreve a desarrollar este mercado educativo no es numeroso. Sin embargo, apunta Barceló, “son pocos pero muy buenos”. Eso sí, hay que salir de la caja. “Da vértigo salir de las fórmulas tradicionales de negocio, que han marcado el paso tanto tiempo; pero los distribuidores deben hacerlo”. Es esencial que estén “alineados con el proyecto educativo de los centros y su propuesta debe estar basada en los servicios”.
Javier Martín recordó que lo que hay que buscar en un partner es un perfil consultor que, una vez que el colegio haya definido su proyecto, le “proporcione una solución global y que le permita permanecer en el centro educativo a lo largo de muchos años”.
La oportunidad de negocio es enorme. «Pero también es una responsabilidad enorme«, puntualiza Carlos Alonso. Ahora bien, el interlocutor en los centros resulta, en ocasiones, difícil de encontrar. Alonso recuerda que hay un responsable TIC por cada 600 alumnos. «Cuando en una gran compañía hay uno por cada 60 o 70 empleados»; de ahí, el inmenso valor que puede proporcionar el canal «más allá de la transformación educativa». A su juicio, deben tener una propuesta de negocio clara y saber adaptarse a las realidades de los colegios, «muy distintas unas de otras».
Vivas recordó lo importante que son la formación y el acompañamiento. «Los colegios se sienten muy solos en el desarrollo de sus proyectos y el canal debe estar cerca; apoyándoles». Por su parte, Jaume Carne insistió en el carácter proactivo del canal que debe invertir recursos en su desarrollo. «No esperar a ver si se publica o no un pliego y ver si puede hacer una propuesta». Ahora bien, al tener menos competencia, «hay mayor oportunidad».
Proyectos innovadores
En el evento, los distribuidores pudieron conocer propuestas, con un componente diferente en este mercado, de Colido-Voladd con un negocio que trata de poner en valor la impresión 3D en el entorno educativo; o Lego Education, con el desarrollo de las STEAM en el aula como objetivo prioritario.
Tampoco faltó el apunte, esencial, que tienen las ONG en este apartado. Ayuda en Acción presento su proyecto que trata de luchar contra la desafección educativa y el abandono escolar. España es el tercer país de Europa con más pobreza infantil, recordó la ONG: un 30 % de la infancia está en riesgo de pobreza y de exclusión social. Además, somos uno de los estados de la UE con mayor diferencia entre rentas altas y bajas. La ONG está desarrollando un proyecto que ya ha alcanzado la formación de 14.000 estudiantes, más de 5.500 familias concienciadas y 684 docentes en 104 centros escolares de 12 Comunidades Autónomas.