TP-Link se muestra optimista respecto a la evolución de su negocio este año. Aaron Wei, country manager de TP-Link en España, confía en su capacidad de I+D, impulsada por el trabajo de 3.000 ingenieros, y sus recursos de fabricación para seguir lanzado “nuevos equipos y soluciones de última tecnología, alta calidad y asequibles para todo tipo de empresas independientemente de su tamaño o sector de actividad”.
Respecto al retraso en el terreno de la transformación digital de las empresas españolas, el directivo considera que la falta de formación, la falta de inversión y la cultura empresarial son factores que están ralentizando este proceso.
“La importancia de la digitalización de las empresas consiste en permitirles realizar su trabajo de forma más eficiente, ahorrando tiempo, energía y costes. El departamento técnico debe asumir este rol y exigir a los fabricantes soluciones que funcionen y resuelvan sus necesidades”, recalca Wei.
España sigue rezagada en el ámbito de la transformación digital de las empresas, a pesar de las iniciativas puestas en marcha en los últimos años para digitalizar al tejido empresarial. Según se recoge en el último informe de la Comisión Europea que mide el progreso de los Estados miembros para cumplir con los objetivos establecidos en el programa sobre la “Década Digital 2030”, nuestro país ocupa el puesto 18º en este apartado con una puntuación de 8,7 frente al 9,6 de la media de la Unión Europea, lo que dificulta la consecución de las metas establecidas. A su juicio, ¿cuáles son las causas de este retraso? ¿Qué papel tendría que desempeñar el sector tecnológico durante 2025 para ayudar a las empresas a completar su digitalización?
Una de las principales causas del retraso está en la falta de formación y, por consiguiente, en la dificultad de encontrar personal altamente cualificado para llevar esa transformación digital a las empresas. Y esta necesidad se encuentra tanto en la propia empresa como fuera de ella. En las propias empresas hay que encontrar y añadir este nuevo talento a la plantilla para que la digitalización pase de ser un proyecto a ser una realidad que facilite el día a día de los trabajadores y repercuta en mejores resultados del negocio.
Fuera de ellas, la responsabilidad recae sobre las empresas instaladoras de tecnología, que deben tener capacidad de analizar cada caso concreto para ofrecer una solución adaptada a sus necesidades específicas de ese momento, pero teniendo en cuenta el futuro crecimiento potencial que pueda tener. En este punto, las certificaciones oficiales son claves para que los instaladores profesionales puedan sacar el máximo rendimiento a cada instalación basándose en un estudio previo, e incluso aprovechar una instalación ya existente para poder reciclarla.
Otras causas podrían ser la inversión económica a realizar en términos de equipamiento, instalación y mantenimiento, cambio en la cultura empresarial para salir del “aquí siempre se ha hecho así”, junto a otros más burocráticos que se suelen escapar al conocimiento de la empresa.
La importancia de la digitalización de las empresas consiste en permitirles realizar su trabajo de forma más eficiente, ahorrando tiempo, energía y costes. El departamento técnico debe asumir este rol y exigir a los fabricantes soluciones que funcionen y resuelvan sus necesidades. De este modo, la propia empresa puede tomar mejores decisiones.
Como empresa, la propia TP-Link se ha beneficiado de la digitalización, y al mismo tiempo ha desarrollado diferentes soluciones para ayudar a otras empresas, especialmente a pymes, a beneficiarse de la digitalización. Mas concretamente con soluciones de redes inalámbricas más rápidas, estables y con mayor cobertura, facilitando los despliegues de red junto a las funciones de supervisión y gestión en remoto para ayudar a las empresas a obtener servicios de red fiables que evitan desplazamientos para solucionar cualquier incidencia y con calidad, lo que permite a los clientes obtener una cobertura de red de alta capacidad y eficiencia a un coste moderado amortizable en 5 o 10 años.
En su caso particular, ¿cómo afronta 2025? ¿Dónde se encuentran las mejores oportunidades de negocio para su compañía y qué estrategia van a poner en marcha para aprovecharlas?
Basándonos en la capacidad de I+D con más de 3.000 ingenieros y los recursos de fabricación propias de TP-Link, hemos lanzado y estamos trabajando para lanzar nuevos equipos y soluciones de última tecnología, alta calidad y asequibles para todo tipo de empresas independientemente de su tamaño o sector de actividad, por lo que miramos al mercado con una actitud positiva.
Creemos que el potencial del sector empresas es muy prometedor. Junto con todos nuestros partners, seguiremos ofreciendo a los clientes finales soluciones y servicios de alta calidad. Lo tenemos todo para seguir creciendo con éxito en 2025.