El panorama de la informática de usuario final (EUC) está en plena ebullición, agitado por los movimientos estratégicos de actores que hasta ahora dominaban el mercado. Las recientes decisiones de Citrix y Omnissa (la antigua división EUC de VMware, Horizon) están generando una ola de incertidumbre y descontento entre clientes y socios, marcada por aumentos de precios y modelos de licenciamiento complejos y restrictivos. Esta situación no solo plantea desafíos significativos para el ecosistema, sino que también abre una valiosa oportunidad para que Microsoft Azure, un actor clave en el espacio del trabajo digital, redefina sus alianzas y consolide su liderazgo.
Las estrategias de Citrix se están centrando en un modelo de licenciamiento más gravoso y enfocado en grandes empresas, lo que lleva a desatender a las pequeñas y medianas empresas. La designación de un único mayorista para Europa y Estados Unidos ha terminado de forzar al canal a buscar alternativas de manera activa.
Por su parte, VMware (ahora Broadcom) está impulsando una migración agresiva de licencias perpetuas a modelos de suscripción, resultando en incrementos de costes sustanciales. La venta de Horizon (ahora Omnissa) y los recortes en inversión generan incertidumbre sobre el futuro de la solución, la calidad del soporte y la rentabilidad de los partners.
Todo esto ha provocado una demanda generalizada de alternativas por parte de clientes, distribuidores, mayoristas, fabricantes e hiperescalares, que buscan liberarse de lo que perciben como condiciones abusivas.
Una oportunidad para reafirmar el liderazgo
En este escenario, Microsoft Azure ocupa una posición privilegiada. Su liderazgo tecnológico es incuestionable, pero mantener una estrategia de exclusividad con Citrix y Omnissa supone hoy un riesgo. Estas alianzas, lejos de fortalecer el ecosistema, están cerrando la puerta a propuestas que realmente aportan valor añadido y limitan la capacidad de los clientes para elegir la mejor solución para sus necesidades.
En este nuevo contexto, Virtual Cable asume un papel fundamental. Como fabricante de UDS Enterprise, nunca centramos nuestra estrategia en los nichos de mercado de Citrix y Horizon; nuestra fortaleza siempre ha residido en sectores como la educación, la Administración pública y las pymes, donde contamos con presencia en más de cien países.
Sin embargo, ante la actual situación, nos hemos convertido en la opción preferente y más recomendada por fabricantes, mayoristas, distribuidores y clientes que buscan soluciones alternativas para el acceso remoto al puesto de trabajo, tanto onpremise como en la nube, incluyendo, por supuesto, los despliegues en Microsoft Azure.
Los clientes nos perciben como un aliado fiable, abierto, ágil y totalmente alineado con sus intereses. Con millones de usuarios a nivel internacional, cada vez más organizaciones confían en nosotros para liberarse de los modelos cerrados y las condiciones abusivas impuestas por los, hasta ahora, dos grandes actores del sector.
El futuro del digital workspace exige socios que sumen valor y aporten seguridad
UDS Enterprise aporta beneficios significativos a Microsoft, optimizando el ROI de las inversiones al eliminar la necesidad de adquirir caras soluciones de conexión de terceros que no añaden valor, lo que a su vez posibilita un mayor consumo de recursos en Azure. Además, UDS Enterprise complementa y facilita la gestión de Azure Virtual Desktop (AVD), ofreciendo una capa de orquestación crucial y, a la vez, expande el alcance a nuevos mercados y segmentos de clientes que serían inviables con otras alternativas más costosas.
UDS Enterprise aporta beneficios significativos a Microsoft, optimizando el ROI de las inversiones al eliminar la necesidad de adquirir caras soluciones de conexión de terceros que no añaden valor
Además, la ciberseguridad y el cumplimiento normativo se han convertido en factores diferenciales y críticos. UDS Enterprise cumple con los más altos estándares internacionales, incluyendo las normativas europeas NIS2 y DORA, y es la única solución VDI incluida en la taxonomía del Esquema Nacional de Seguridad (ENS) y prescrita por el Centro Criptológico Nacional (CCN). Estamos además en proceso de certificación FIPS y DISA para el mercado estadounidense, lo que nos sitúa como una alternativa de confianza para sectores especialmente sensibles en la seguridad.
Esta apuesta por la seguridad y el cumplimiento normativo no es un accesorio: es un requisito para garantizar la resiliencia operativa y la protección de la información en entornos cada vez más híbridos y distribuidos.
La confianza, clave del futuro
El futuro del puesto de trabajo digital se construirá sobre la base de la confianza, la colaboración y la libertad de elección. Es tiempo de distinguir aquello que suma de aquello que resta y de apostar decididamente por aliados que verdaderamente aportan valor al ecosistema y a los usuarios.