España parte de una buena posición, pero necesita mejorar las competencias digitales para afianzar su transformación digital. Esta es una de las conclusiones que se extrae de la primera jornada del segundo congreso anual de DigitalES, que se está celebrando en Madrid. La ministra de economía en funciones, Nadia Calviño, explicó durante la inauguración del encuentro que “España está muy bien posicionada en el proceso de digitalización gracias al esfuerzo público y privado”.
La ministra destacó el buen nivel de las administraciones públicas como un vector para la transformación y la posición de liderazgo de algunas de las principales empresas españolas que están siendo motores para la digitalización; aunque matizó que “es preciso amentar la inversión pública y privada en I+D, abordar la transformación digital de las pymes y mejorar las competencias digitales a todos los niveles; de ahí la importancia de la educación”.
Eduardo Serra, presidente de DigitalES, calificó como decisivo el momento que se está viviendo y subrayó que España “no se puede perder la revolución digital como se perdió la revolución industrial del siglo pasado”. Para Serra, “la tecnología va a decidir la hegemonía mundial de los próximos diez años” y nuestro país cuenta con una buena posición para estar a la cabeza de la digitalización.
Digitalización de España
El nivel y la situación de España para afrontar el reto de la digitalización fue objeto de debate en un panel en el que participaron Víctor del Pozo, consejero delegado de El Corte Inglés; José Antonio López, presidente y CEO en España de Ericsson; Marta Martínez, presidenta España, Portugal, Grecia e Israel de IBM; Ignacio Gallego, presidente España de Nokia; y Emilio Gayo, presidente de España de Telefónica.
Los directivos coincidieron en señalar que España ocupa posiciones de liderazgo en Europa en algunos aspectos, pero recalcaron que queda mucho por hacer sobre todo en el terreno de la formación en habilidades digitales y en el ámbito de las pequeñas y medianas empresas.
La presidenta de España, Portugal, Grecia e Israel de IBM comentó que “estamos en una fase en la que hay que poner bien los pilares de la empresa para poder crecer y transformarla en todos sus ámbitos de forma que todos los departamentos de la compañía puedan sacar partido a esa digitalización”.
Ignacio Gallego explicó que en este proceso de transformación digital hay dos velocidades, la de las grandes empresas y las de las pymes, a las que hay que dotar de herramientas para que puedan abordar este proceso con éxito. A su juicio, “es un reto colectivo”, que necesita más implicación de la Administración Pública. “La administración tiene mucho que aportar, pero lo que se está haciendo no es suficiente. En el ranking digital España está en el puesto 35, siendo la economía 13 del mundo, por tanto, hay una brecha que hay que recuperar”, recalcó.