La Comisión Europea ha elegido al Barcelona Supercomputing Center- Centro Nacional de Supercomputación (BSC) para albergar uno de los superordenadores pre-exascala de la red de supercomputadores de alta capacidad promovida por la Comisión. El futuro ordenador de BSC tendrá una potencia pico de 200 Petaflops (200 mil billones de operaciones por segundo) y se pondrá en marcha el 31 de diciembre de 2020.
Este anuncio forma parte del plan de la Comisión Europea de adquirir ocho superordenadores: tres máquinas pre-exascala (con un rendimiento pico de al menos 150 Petaflops) y cinco superordenadores petascala (capaces de ejecutar como mínimo 4 Petaflops). El objetivo de la Comisión y de los estados que forman la EuroHPC Joint Undertaking es que la Unión Europea mantenga un lugar destacado en el terreno de la supercomputación.
La elección del BSC, cuya candidatura contaba con el apoyo de Portugal, Turquía, Croacia e Irlanda, supone un aval al trabajo realizado desde el BSC desde hace 15 años.
En este superordenador, denominado MareNostrum 5, la Unión Europea podría invertir cerca de 100 millones de euros. El Ministerio Ciencia, Innovación y Universidades, la Generalitat de Catalunya y los estados que apoyaron la candidatura completarán la inversión.
Según comunicó el BSC, MareNostrum 5 también servirá para crear tecnologías que permitan desarrollar la nueva generación de superordenadores con sello europeo.
A su juicio este anuncio, ¿respalda el trabajo de I+D español? ¿Impulsará el papel tecnológico de España dentro de la Unión Europea?