Lo asegura Schneider Electric (apoyada en un estudio encargado a IDC): los centros de datos continúan siendo voraces en materia de espacio demandado: se pasará de los 482,2 millones de metros cuadrados que ocupaban en 2013 hasta los 590 millones que se calcula que llenarán en 2018. Una demanda en la que los proveedores de servicios ganarán protagonismo: en ese año 2018 sus necesidades se colmarán en 48,95 millones de metros cuadrados, lo que supone un 45,6 % de la construcción de los nuevos centros de datos de alta gama. ¿La razón? Muchas empresas se ven desbordadas por sus necesidades y, en lugar de invertir de manera interna, optan por externalizar. Asegura el informe que las compañías especialistas serán las que se lleven esta externalización.
La “diversificación” será un hecho: el 30 % de los activos TI residirá en micro centros de datos y en puntos de servicio fuera de localizaciones centralizadas (edge computing). Un diseño que favorece la implementación de aplicaciones localizadas en conjuntos de uno a diez racks.
El estudio pone énfasis en señalar hacia dónde enfila el centro de datos del futuro. La primera exigencia es que deben adecuarse a las nuevas cargas de trabajo y a la diversificación de las TI: se calcula que el 65 % de las inversiones de infraestructura serán para sistemas de relación, conocimiento y acción, frente al mantenimiento de los sistemas de registro actuales. Antes, la mayor parte de las cargas se destinaba a la gestión de la información del empleado, al back-office y a los sistemas de registro de información interna.
La externalización parece que será la reina: la marca asegura que el 65 % de los activos TI residirá en entornos cloud en centros de datos que se ubicarán fuera de las instalaciones de la empresa. Un tercio del personal tecnológico recibirá su sueldo como parte de la plantilla de un proveedor cloud. Así, la empresa deberá armonizar un amplio abanico de servicios en la nube y operarán en diferentes entornos. El informe calcula que el crecimiento acumulado del gasto relacionado con servicios cloud en España será del 24 %.
Se ganará en automatización: el 60% de las empresas utilizará centros de datos que exhibirán un nivel avanzado de instrumentación y harán uso de la automatización para aumentar la eficiencia. Por último, el 8 % de los nuevos centros usarán energías renovables o alternativas como fuente principal de alimentación
Mapa actual
Schneider Electric calcula que un número elevado de centros de datos cuentan con más de un lustro de existencia, lo que a su juicio genera ineficiencias a corto y medio plazo. Además han sido construidos con una orientación hacia unas cargas de trabajo estables, o que cambien a un ritmo predecible; lo que con las nuevas exigencias digitales supone un freno enorme.
Su ubicación tampoco es correcta: muchos se construyeron primando la cercanía con la oficina central; algo que ahora, donde prima la orientación al cliente y la agilidad, queda obsoleto. Lo que manda es la cercanía a un punto de interconexión de la red, a núcleos de población o a clientes.