La pandemia de la covid-19 ha cambiado el futuro del trabajo, acelerando la implantación del teletrabajo y generando nuevas expectativas a los empleados para mejorar su calidad de vida. Esta es una de las conclusiones del informe presentado por Microsoft, elaborado por Boston Consulting Group y KRC Research, en el que ha consultado a 9.000 directivos y empleados de empresas de más de 250 trabajadores de toda Europa.
El informe revela que se ha dado un enorme salto en las políticas de trabajo flexible. En 2019 solo el 15 % contaba con estas políticas frente al 76 % de 2020. Este hecho indica que el trabajo es en remoto en la nueva normalidad.
Los empleados han asumido este modelo con entusiasmo señalando que disponen de más tiempo para la familia y los amigos (47%), tienen un espacio de trabajo personalizado (49 %), más tiempo para hobbies (47%) y la opción de llevar la ropa que deseen (69 %).
Para las compañías el trabajo en remoto les proporciona una mayor productividad y reducción de costes. Así lo asegura el 40 % de los directores encuestados.
Este auge del trabajo en casa o fuera de la oficina ha cambiado la manera de ver el trabajo para la mayoría de las empresas y trabajadores. De hecho, los directivos encuestados creen que el 65 % de las plantillas continuarán parcialmente en un modelo híbrido tras superar la crisis de la covid-19.
Sin embargo, el teletrabajo trae asociado varios retos como mantener la cultura empresarial, cohesionar los equipos y lidiar con una cantidad cada vez mayor de silos. Para implantar este modelo con garantía y de manera óptima el informe distingue siete pasos para llevar a cabo este proceso con éxito. El primero es tener una visión clara del papel que tiene que jugar para definir el tipo de modelo más efectivo en la organización, que sería el segundo paso. Los tres siguientes tienen que ven con los facilitadores necesarios para asegurar el tipo de modelo elegido, mientras que los últimos serían los relacionados con las soluciones y la infraestructura necesaria para llevarlo a cabo.
Trabajo remoto en España
El informe, se ha llevado a cabo en 15 países europeos, incluido nuestro país, refleja que el teletrabajo ha llegado para quedarse. Al igual que el 95 % de los directivos del resto de Europa, los responsables de las empresas españolas consideran que la adaptación de la forma de trabajo es clave para impulsar la innovación y la flexibilidad dentro de sus prioridades de transformación empresarial.
En nuestro país solo los sectores de sector público (8 %), industria (11 %) y servicios de consumo (17 %) no consideran tan importante estas medidas.
Las políticas de trabajo flexible han crecido en Europa hasta el 76 % este año, pero en nuestro país el crecimiento ha sido superior, cifrándose en el 83 %. Además, el 76 % de los directivos españoles cree que el teletrabajo, además de incrementar la productividad, es un factor importante para la retención del talento.
El informe resalta también que en todos los países es necesario impulsar los modelos de trabajo flexibles sin que se resienta la innovación y para esto es necesario que las personas puedan comunicarse con sus compañeros, asumir riesgos de forma inteligente y ser proactivos cuando se les ocurren ideas nuevas. Por este motivo el desafío para las empresas reside en asegurarse de que sus profesionales se sienten conectados con sus compañeros y perciban claramente cómo el trabajo en equipo contribuye a hacer realidad la visión de la empresa.