1.696 millones de euros. Esa es la cifra de negocio cosechada por Samsung el pasado año en España, lo que representa un 6 % menos que el año anterior. La razón principal, además del competitivo mercado al que se enfrentó la compañía, fue la venta de su negocio de impresión a HP en el ejercicio anterior. Otras cifras destacadas son el balance de explotación, que alcanzó los 32,4 millones de euros, mientras que los resultados después de impuestos se situaron en 26 millones.
Según los cálculos de la multinacional, su contribución al PIB español ascendió a 752,3 millones de euros (63,7 de ellos fueron contribución directa de la compañía) mientras que el impacto fiscal total generado ascendió a 632,2 millones de euros. La mayor aportación tributaria procedió del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), que se situó en los 429,8 millones de euros, lo que supone un 68 % de la contribución fiscal total generada por Samsung.
En el análisis de su plantilla, ésta culminó el año con 358 personas y cabe destacar que el 100% de los contratos laborales son indefinidos.
El desarrollo del mercado educativo es una pieza esencial. Samsung colabora con la Administración Pública para favorecer el uso de la tecnología en la enseñanza a través de Samsung Smart School, iniciativa desarrollada por quinto año consecutivo en colaboración con el Ministerio de Educación y Formación Profesional junto con las consejerías de Educación de las 17 Comunidades Autónomas. El proyecto ya se ha implementado en 108 centros educativos de España, con más de 4.000 alumnos participantes.