El año pasado BSA registró 493 denuncias por el uso de software ilegal en su portal. Esta cifra supone un 33 % más que en 2015 e implicó el incremento de las acciones legales. Los principales denunciantes de esta situación fueron los exempleados, seguidos de las empresas competidoras y personas anónimas que trabajan en empresas sospechosas del uso fraudulento del software.
Estos datos confirman que el canal de distribución todavía no está tomando un papel relevante a la hora de combatir este problema. ¿Tendría que ser más activo a la hora de luchar contra la piratería del software?