RedGreen es una nueva cadena de franquicias, creada por Santiago Polo, gerente de la enseña, que nace con el fin de aportar negocio tanto a sus franquiciados como a mayoristas y fabricantes. Su filosofía de trabajo se basa en la transparencia y en generar nuevas oportunidades dentro del sector de las nuevas tecnologías. Para lograrlo cuenta con un sistema de cotización para generar el mejor precio, un abanico de servicios y una imagen actual. La cadena, que comenzó su andadura el pasado mes de noviembre, tiene previsto ejecutar un ambicioso plan de expansión para consolidar su propuesta y competir con los principales jugadores de este mercado.
El proyecto de RedGreen comenzó a gestarse hace año y medio liderado por Santiago Polo, un profesional con una trayectoria de 20 años en el sector informático, que conoce las fortalezas y carencias del sector. Esta experiencia unido al hecho de que en el mercado faltaba una franquicia con una filosofía distinta le animó a desarrollar RedGreen. “Hay franquicias que no aportan nada a su punto de venta, que que compra fuera de la franquicia y solo tiene un folleto o un rótulo. Vi que había un hueco para un tipo de franquicia distinta”, subraya Polo. Este fue el punto de partida del proyecto que se sustenta en la transparencia y en generar negocio a sus franquiciados. “La diferencia con el resto de franquicias es la filosofía. RedGreen vive aportando el negocio y el máximo beneficio al punto de venta”, recalca.
Ventajas y servicios
Entre las ventajas que aporta, figura su sistema de cotización para lograr el mejor precio a sus puntos de venta. Este sistema se basa en un software integrado en un ERP que se le ofrece al franquiciado para que haga sus pedidos. El sistema agrupa todos los pedidos generando uno solo y consiguiendo que los mayoristas hagan su mejor oferta para ese pedido. La intención es que el precio sea el mejor y para conseguirlo en el sistema también pueden participar otros puntos de venta, que no son franquiciados, pero sí asociados. Polo confirma que a esta figura, que suele ser un punto de venta asentado con una imagen propia y al que no le interesa ser franquiciado, RedGreen también le puede aportar porque puede obtener mejores condiciones de las que disfruta en la actualidad. Al mismo tiempo, estos clientes suponen un nuevo negocio para el mayorista. “Lo que intentamos es no penalizar entre el mayorista y el punto de venta. El margen de intermediación es mínimo, menos de la mitad que nuestros competidores”, añade Polo. RedGreen también premia por las compras. “Vamos bonificando por escalados y devolviendo en royalty que tiene un franquiciado de RedGreen. Y si devolvemos entero el royalty seguimos bonificando y damos hasta el 50 % de nuestro margen de intermediación”.
Otra de las ventajas que ofrece es un portafolio completo basado en la oferta de los ocho mayoristas con los que cuenta en este momento; aunque su catálogo se ampliará porque la enseña mantiene contacto directo con algunas marcas líderes de su categoría, según confirma Polo. Y además tiene previsto modificar su red de mayoristas, ya que esta estructura se reforzará con un par de figuras más.
Junto a su portafolio de productos, RedGreen ha preparado un conjunto de servicios para que el punto de venta pueda responder a las necesidades del cliente. Estos servicios incluyen desde el comercio on-line hasta servicios de telecomunicaciones, servicio técnico y asesoría.
Planes
Con esta propuesta, ha dado sus primeros pasos. Ha cerrado acuerdos con más de 90 asociados y ha inaugurado sus primeras dos tiendas RedGreen. Sus planes pasan por consolidar su negocio abriendo nuevas tiendas, mejorar su oferta y posicionarse como marca. El objetivo, como apunta Polo, es que RedGreen compita con las grandes franquicias y en un futuro extender su actividad al mercado portugués.