Internet de las cosas es un concepto que hace referencia a la interconexión de objetos con el fin de mejorar tareas y procesos en el ámbito de los negocio y de la vida cotidiana. El término puede ir más allá de los dispositivos y agrupar a personas, procesos y datos para generar el denominado “Internet de Todo”, lo que abre las opciones e integra numerosas tecnologías relacionadas como la movilidad, el cloud, la seguridad, el almacenamiento y la analítica. Los proveedores creen que es una vía de negocio que no sólo reportará beneficios a sus compañías sino que cambiará la sociedad. Si las previsiones se cumplen, en 2020 habrá 50.000 millones de dispositivos conectados y hasta 11 billones de euros en juego hasta 2023.
Internet de las cosas es un término que está de “moda” y figura en los rankings de tendencias de los analistas del mercado y en los planes de los principales proveedores tecnológicos; pero para comprender su dimensión y el impacto en la sociedad hay que precisar a qué se refiere este concepto. Para Jorge Lang, director de innovación y crecimiento de mercado para el sur de Europa de Intel, Internet de las cosas consiste en “una red de dispositivos de todo tipo interconectados: dispositivos personales, aparatos tradicionales y sensores que registran datos y los comparten. Objetos cotidianos que se transforman en soluciones inteligentes e impulsadas por los datos para solucionar los problemas del mundo real”.
La visión de IBM es similar y comparte la idea de su utilidad para mejorar la vida de las personas. “Todos estos dispositivos y sistemas interconectados generan un volumen de datos e información que podemos leer, entender y aprovechar para mejorar nuestra vida cotidiana”, según indica Víctor Carralero, director de Websphere de IBM, España, Portugal e Israel. Esta idea subyace en el modo que entienden los proveedores, aunque con varios matices y enfoques.
Cisco entiende que Internet de las cosas es únicamente una parte del ecosistema de dispositivos conectados y se refiere solo a los objetos. Su concepto va más allá y apuesta por el “Internet del todo” o Internet of Everthing —en su denominación inglés—. “El Internet de las cosas es un subconjunto del “Internet de todo”, un conjunto mayor donde se añaden personas, procesos y datos y donde nuevos objetos como televisores, frigoríficos, coches, semáforos o instrumentos médicos, antes “callados”, ganan “voz”, capacidad de “sentir” y capacidad de proceso, generando miles de millones de conexiones cuya información puede mejorar la economía y contribuir al progreso de la sociedad”, puntualiza Mª José Sobrini, directora de Cisco Consulting para EMEAR.
“Esta red de cosas conectadas ofrecerá nuevas capacidades, experiencias enriquecidas y oportunidades económicas sin precedentes para las personas, las empresas y las naciones”, añade Joäo Carvalho, director de soluciones y desarrollo de negocio de SAP España.
En el mundo, según datos de McKinsey, hay 9.000 millones de dispositivos conectados a Internet, una cifra que se incrementará en la próxima década con diferentes estimaciones que oscilan de los 50.000 millones hasta 1 billón.
Las previsiones auguran una explosión de dispositivos conectados y apuntan a que en el año 2020 se pueden alcanzar los 50.000 millones de objetos conectados. El año 2025 puede representar un volumen de negocio entre 2.700 millones y 6.200 millones de dólares. Sin embargo, en este momento el mercado está en una fase inicial.
Hay sectores más avanzados como el de retail, utilities, industria y transporte. Lang, de Intel, indica que es un proceso que llevará tiempo, pero que ya se están dando pasos para avanzar. “Hasta ahora eran básicamente sensores aislados o conectados a redes específicas, ahora con la facilidad de incorporar capacidad de proceso en diminutas placas junto con su reducido consumo se está acelerando la inteligencia local junto a la facilidad de conexión, vía redes abiertas”.
Sobrini, de Cisco, comenta que hay empresas y administraciones que ya han comenzado a implantar estas soluciones pero las que “primero aprovecharán su valor son las que realizan un uso intensivo de las TI como las empresas del sector de alta tecnología y telecomunicaciones y servicios financieros”.
Entre los sectores con más potencial para el desarrollo del Internet de las cosas se encuentran el Gobierno o la Administración Pública, con el desarrollo de las ciudades inteligentes y los servicios de atención al ciudadano; la atención sanitaria; la seguridad, con aplicaciones de videovigilacia IP; el del comercio, mediante compras y pagos automáticos, y el de consumo, gracias al hogar conectado.
Estrategia y oferta
A la hora de abordar este mercado y preparar una oferta específica, los proveedores en función de su especialización y sus fortalezas están ejecutando distintas estrategias. Fujitsu, dentro de su estrategia Human Centric Innovation, está invirtiendo del orden de 215 millones de euros al año en I+D con el fin de “aportar inteligencia a todo lo que nos rodea”, según indica Susana Otí, responsable de marketing de canal de Fujitsu en España.
Intel está centrado en dotar de inteligencia a nuevos dispositivos y gateways —o puertas de acceso— para ayudar a conectar los miles de millones de dispositivos existentes a Internet; y ofrece una serie de componentes básicos para crear soluciones dentro de este ámbito. “Intel ha desarrollado Intel Gateway Solutions, una tecnología para convertir los objetos cotidianos en objetos conectados. Existen más de 25 soluciones diferentes destinadas a los mercados de fabricantes, transporte, industria y establecimientos comerciales. Estos productos se basan en procesadores Intel Atom e Intel Quark y cuentan con opciones de seguridad de McAfee y Wind River”, explica Lang.
IBM está trabajando en tecnologías de explotación y análisis de datos con el fin de que las empresas puedan sacar partido a las tendencias vinculadas al Internet de las cosas como analítica, el cloud, movilidad o seguridad. “Nuestro nuestro objetivo en este sentido es ayudar a las empresas a que evolucionen sus infraestructuras, arquitecturas y organizaciones para ser capaces de aprovechar las ventajas de todas estas tendencias”, recalca Carralero.
SAP, como confirma Carvalho, está articulando una estrategia basada en su plataforma HANA , a la que suma una red de alianzas con otros proveedores de hardware y software para crear un ecosistema con el fin de impulsar este tipo de proyectos. Su oferta se asienta en tres pilares: aplicaciones o soluciones dirigidas a diferentes áreas como el mantenimiento productivo, logística conectada o retail conectado, entre otros; la gestión de los dispositivos y la plataforma HANA para la gestión de datos.
Cisco está trabajando en lo que denomina Fast IT, una nueva plataforma que combina todos los elementos que componen el “Internet de todo” como el cloud, movilidad, seguridad y big data para crear aplicaciones de negocio y acelerar la innovación. “Cisco lleva más de cinco años —en colaboración con sus partners tecnológicos— utilizando la combinación de dispositivos y sensores conectados, junto a la capacidad de computación, almacenamiento y análisis de datos sobre redes inteligentes, para optimizar los procesos de múltiples industrias y segmentos de mercado”, subraya Sobrini.
Su oferta se concreta en tres apartados: Smart y Conected Communities, para las ciudades inteligentes; Smart Grid o redes eléctricas inteligentes y Conected Industries, que contempla soluciones para distintas industrias como fabricación, automoción, transportes, minería, petróleo y gas, retail, atención sanitaria, educación, etc.
Un eje estratégico que comparten los fabricantes son las alianzas para acelerar la adopción de este tipo de soluciones. Un ejemplo es el acuerdo que IBM firmó con la empresa española de ingeniería Libelium con la que han lanzado un kit de desarrollo que se compone de la plataforma de sensores inteligentes Waspmote de Libelium y el sistema operativo Mote Runner de IBM, un software específico para pequeños dispositivos que se pueden embeber. “El sistema se basa en el estándar 6LoWPAN, que permite a cualquier dispositivo o sensor conectarse directamente a Internet, utilizando el nuevo protocolo Ipv6”, indica Carralero.
Los proveedores cuentan con un aliado para dar a conocer y fomentar la implantación de estas soluciones: el canal de distribución. Otí, de Fujitsu, explica que se está preparando para esta realidad y, como en otros apartados, “juntos abordamos todos los desafíos que las TIC lanzan a la sociedad. Ellos son la manera más clara y valiosa de llegar a todo tipo de clientes”.
El canal tendrá mucho que aportar en este mundo conectado. A juicio de Carvalho, de SAP, el “papel del canal resultará crucial”. Los distribuidores podrán asesorar a las empresas y ayudarles en todo el proceso de despliegue. SAP está trabajando con sus partners para crear un ecosistema que permita integrar las soluciones y los dispositivos de diferentes fabricantes con el fin de poner en marcha diversos proyectos. “Internet de las cosas abre un mundo de posibilidades para el canal de distribución”, subraya.
Cisco también está trabajando con sus partners para implantar este tipo de soluciones. Cree que las empresas, para obtener todo el potencial del “Internet de todo”, tienen que invertir en infraestructura y capacidades tecnológicas adecuadas como cloud, movilidad o seguridad con el fin de actualizar procesos. Y, al mismo tiempo, adoptar nuevas prácticas en toda la organización y diseñar estrategias efectivas de gestión de la información.
En este contexto, la labor del canal se torna imprescindible. Sobrini recalca que “el canal de distribución juega un papel esencial a la hora de ayudar a las empresas y Administraciones a realizar esta transición hacia el nuevo modelo de Fast IT”.
Proyectos
Junto con sus partners todos los proveedores se están poniendo en marcha diferentes proyectos. Fujitsu está trabajando en varios sectores, como el comercio, en el que está impulsando la compra a través del seguimiento visual mediante sensores que detectan lo que mira el cliente y le ofrece información del artículo.
El terreno de las ciudades inteligentes es el ámbito que está acaparando más iniciativas.
IBM ha firmado un acuerdo con la compañía AT&T para combinar sus tecnologías con el objetivo de desarrollar soluciones adaptadas a la Administración local. Según detalla el responsable de IBM, las ventajas que ofrecen son diversas y pueden a “través de la evaluación de patrones y tendencias mejorar la planificación urbana y gestionar los recursos y servicios municipales para reducir costes”.
En un plano práctico estas soluciones consisten en el análisis de los datos de los contadores de agua o electricidad, de los vehículos en tránsito o los que recogen las vídeocamaras, el seguimiento de los comentarios sobre la ciudad y sus servicios en redes sociales, etc.
Cisco también está fomentando los proyectos para dotar de inteligencia a las ciudades. Un ejemplo es el trabajo que están desarrollando con Philips para investigar los beneficios para las ciudades que resultan de conectar el alumbrado público a Internet a través de sensores y redes inteligentes con el fin de mejorar la toma de decisiones y conectar el alumbrado dónde y cuándo sea necesario.
Sobrini cita algunos ejemplos prácticos como el proyecto realizado con la compañía City24/7 en Nueva York que consiste en ofrecer en monitores inteligentes, situados en las paradas de autobuses, estaciones de tren, centros comerciales y deportivos, información útil, servicios interactivos y ofertas en tiempo real.
Otro ejemplo es el de la ciudad de San Carlos (California). En este caso, los conductores pueden recibir en sus teléfonos inteligentes información sobre las plazas de parking disponibles en tiempo real.
En el segmento de smart grids, Cisco también tiene una posición destacada, ya que más de 250 utilities en todo el mundo han adquirido sus soluciones de su oferta Connected Grid, según confirma la directora de Cisco Consulting en EMEAR.
SAP también ha desarrollado numerosos proyectos destacando el área de Industria 4.0 en el que tiene 1.200 clientes en el área de automatización de procesos de fabricación. Tiene también soluciones para pagos, la gestión remota de activos, la cadena de suministro y operaciones; y son especialmente relevantes el conjunto de soluciones para el comercio bajo la denominación SAP Connected Retail que permiten mejorar la experiencia de cliente. En este último apartado ofrece opciones de pago por NFC, lectores de código de barras y pantallas táctiles conectadas a Internet a través de SAP HANA Enterprise Cloud e integradas con el ERP.
Joäo Carvalho, de SAP, resalta el proyecto llevado a cabo con BMW para el coche conectado. Las compañías están trabajando “en el desarrollo de una plataforma cloud que servirá de enlace entre BMW y socios externos para proporcionar servicios complementarios tales como aparcamiento, repostaje, bebidas y comida, entre otros. La información de esas terceras empresas es agregada en un marketplace virtual que, en el futuro, podría proporcionar a conductores y pasajeros ofertas personalizadas y contextualizadas a través del panel de control del coche o de un dispositivo móvil”.
Intel también cuenta con ejemplos prácticos de la aplicación de este tipo de soluciones que pudieron conocerse en la última edición del Intel Developer Forum. Entre los casos presentados destacó el de la silla de ruedas conectada que consistió en el uso del kit Intel Galileo Development y Intel Gateway Solutions for IoT para crear una silla de ruedas que permite la recopilación y análisis de información biométrica del usuario, además de la información mecánica de la máquina. “El equipo también creó una aplicación que permite a los usuarios de sillas de ruedas localizar y valorar la accesibilidad de los lugares, mejorando la experiencia de usuario”, explica Lang.
Estos proyectos dan idea de dónde se encuentran las mejores oportunidades de negocio. El responsable de Intel señala que “por volumen los dispositivos B2B serán la clave, pero la relevancia y liderazgo social de los dispositivos B2C que interaccionan con los usuarios marcarán la experiencia del usuario y la evolución general de la tecnología”.
Los proveedores coinciden en identificar a la industria, el transporte, la energía y el retail como sectores que presentan mejores oportunidades de negocio. Además de todas las que ofrece el ámbito de las ciudades inteligentes y la Administración Local. En este sentido, Cisco ha evaluado el impacto que pueden tener en el sector público y estima que los Gobiernos de todo el mundo podrían obtener un ahorro de 3,5 billones de euros hasta 2023. Para las empresas también es una enorme oportunidad. “Según los cálculos de Cisco, con el Internet of Everything hay 11 billones de euros de potencial económico “en juego” hasta 2023 para las empresas del sector privado a escala global; de los que el continente europeo podría capturar un 30 %”, confirma la responsable de Cisco. Carralero, de IBM, también señala oportunidades en las tecnologías que están incluidas en el Internet de las cosas como “movilidad, analítica, cloud y seguridad”.
Otí, de Fujitsu, pone el acento en la transformación de la sociedad que acarreará. “Creará nuevos perfiles de trabajadores y nuevas necesidades en el puesto de trabajo, que no debemos olvidar en el desarrollo de esta nueva economía y desarrollo social”.