La normativa fija que en el año 2016 se tiene que recoger el 45 % del total de las toneladas de aparatos eléctricos y electrónicos que se ponen a la venta en el mercado.
Para cumplir con esta exigencia el papel del canal es clave, ya que está en contacto directo con el usuario final y además tiene la obligación de recoger aparatos en desuso no solo por la compra de uno nuevo sino también los de dimensiones inferiores a los 25 centímetros cuando tenga un establecimiento con una dimensión superior a los 400 metros cuadrados. En esta labor cuenta con la colaboración de entidades como Recyclia, pero ¿realmente el canal está comprometido con el medio ambiente? ¿colabora en la tarea de reciclar estos residuos? ¿ayuda en las labores de concienciación al usuario? [poll id=»32″]