“No queremos ser los más grandes sino los mejores”. La sentencia, de Javier Bilbao-Goyoaga, presidente de V-Valley Iberia, es una clara declaración de las intenciones que persigue la unidad de valor de Esprinet tras la compra de GTI, con la que pretende ganar relevancia en un mercado cada vez más despejado de contrincantes. “Aún tenemos mucho que hacer en este apartado pero no hay duda de que hemos ganado en credibilidad y somos un mayorista con mayor atractivo para los fabricantes”, reconoció.
Aunque desveló que su obsesión no es el ranking, la operación, una vez materializada, situaría al mayorista como el número dos en el segmento del valor en el sur de Europa, gracias a la inyección de negocio de la compañía española, que elevaría el negocio del grupo en esta área hasta los 744 millones de euros (un 32 % de crecimiento en relación a los 561 millones facturados el pasado año). GTI, además, potenciaría el peso de España y Portugal en este apartado (se elevaría hasta el 41%), colocando a la unidad de valor ibérica como el número dos del mercado local de valor. “La facturación rondaría los 310 millones de euros”, contabilizó.
La compra de GTI se erige como un extraordinario trampolín que permitirá afianzar la ambiciosa previsión del presidente: duplicar el negocio ibérico en los próximos 5 años. “Contamos con los recursos, el volumen y las sinergias para lograrlo”, enlazó. “Y, por supuesto, seguiremos analizando el mercado para observar otras posibles adquisiciones”, desveló. “Nuestro recorrido, tanto en mercados emergentes, como es la impresión 3D, la robótica, la movilidad urbana o la inteligencia artificial, como en el desarrollo de estrategias de externalización en nuestros clientes, es enorme”.
Uno más uno: más que dos
Bilbao-Goyoaga insistió en la complementariedad perfecta de GTI con las fuerzas de V-Valley, a las que va a dotar de una mayor profundidad de negocio en la venta del software como servicio y en el desarrollo de los modelos cloud. “Fue pionero en el desarrollo de ambos modelos y ha culminado, de manera exitosa, su transformación desde un modelo tradicional”, recordó. El tercer eje de la estrategia de GTI pivota en el negocio de la identificación automática, herencia de Diode.
GTI suma un negocio cercano a los 180 millones de euros (su facturación en su último año fiscal): el 29 % procedía de la venta de software tradicional, bajo un modelo de licencia; y el 34 % ya fue facturación en la nube. Bilbao-Goyoaga tiene claro que la compra no les va a hacer perder ni un euro. “Uno más uno van a ser más que dos”, prevé. “El negocio alrededor de la nube presenta importantes crecimientos, lo que le convierte en uno de los vectores claves”. A su juicio, apenas existen solapamientos en la oferta. “Hemos dado un salto tanto cuantitativo como cualitativo en nuestro negocio”.
También se gana en capilaridad ya que se suman los 5.500 clientes de GTI, que se unen a los cerca de 4.000 con los que V-Valley Iberia ponía en valor su negocio.
Cinco fuerzas en V-Valley Iberia
Viendo los buenos frutos que ha dado la “independencia” de Vinzeo tras su compra hace cuatro años, Esprinet va a replicar modelo con GTI. “Permanecerá autónoma, con su equipo propio, su particular estructura de negocio y, por supuesto, su CEO actual, Hugo Fernández, al frente”, relató. “Buscamos crecimiento en el negocio y para ello es básico mantener la estrategia que han definido hasta este momento”.
Con ello, GTI se integrará, como una unidad más, en la estructura de valor de V-Valley Iberia, junto a las unidades de seguridad (que dirige Alberto López), cloud y servicios (al mando de Luisa Paolucci), HPE y Aruba (bajo la dirección de Rafael Pestaña) y el área de Value Solutions (con Fernando Feliu al frente). Un quinteto abrazado por el área de servicios profesionales en el que aparecen la formación, las soluciones logísticas, el uso del centro local de demostraciones (al que se une otro móvil), los servicios financieros o la generación de demanda, entre otros.
Bilbao-Goyoaga insistió en las sinergias que se abren en la oferta. Incluso en áreas como la seguridad, en la que el directivo volvió a remarcar el sabor “cloud” de GTI; o Microsoft, marca de la que ambas compañías disfrutan del atractivo y rentable contrato de MSP. “En principio, mantendremos ambos contratos ya que se trata de negocios también complementarios”, aseguró.
El área más joven se identifica con la seguridad. López reconoció las dificultades primigenias que han desembocado en un trabajo extraordinario que les ha permitido multiplicar por seis la facturación en dos años. La clave: el trabajo con un grupo reducido de marcas, entre las que se cuenta Check Point (espera acabar año siendo su primer mayorista) o McAfee (son ya número uno). “Si hace un par de años, cuando iniciábamos la división, las marcas se querían ir, hoy están llamando a nuestra puerta”, reconoce. “Somos los más ágiles y la competencia nos empieza a mirar”, asegura. “Crecemos más que el mercado lo que supone que hemos restado espacio a la competencia”.
Entre las claves de este excelente balance, las sinergias con el área cloud que dirige Paolucci, que les “han permitido desarrollar numerosos proyectos”. Un área en la que Microsoft se erige como pilar fundamental en todas sus áreas (puesto de trabajo, ERP, CRM y Azure). “Actuamos como agregadores de diferentes marcas que se integran en nuestra propia plataforma”, relata Paolucci.
La distribución de las soluciones de HPE y Aruba son pilar esencial de negocio. Pestaña recuerda que son el mayorista de referencia de la marca americana. “Estamos perfectamente alineados con su estrategia que gira en torno al edge, la nube híbrida y los modelos como servicio que identifica GreenLake”, recuerda. “Nuestro reto continuo es ayudar al canal de HPE a transformarse hacia los modelos como servicio”.
187 certificaciones adornan el área que dirige Feliu que se materializa en una “cocktelera” que reúne todas las tecnologías necesarias para poner en marcha cualquier proyecto “desde el edge hasta el centro de datos”: cómputo, almacenamiento, redes, cableado, eficiencia energética, comunicaciones unificadas o videovigilancia. “Tenemos sinergias con todas y cada una de las unidades de negocio de la compañía; claves para acabar con los proyectos monolíticos que cada vez tienen menos sentido”, resaltó. A su juicio, el impulso que han experimentado los proyectos de transformación digital ya no tiene marcha atrás. “Estamos pendientes, no solo de las tecnologías emergentes sino también de las que pueden pintar el futuro”.
Nueva web
Para refrendar esta “nueva” estructura de la unidad de valor, el mayorista ha lanzado una nueva web (www.v-valley.es) que, bajo un único paraguas, reúne toda la oferta y las diferentes actividades que ejecutarán cada una de las unidades. Es una página, intuitiva, y de fácil navegación.
V-Valley Europa
La compra de GTI ha permitido un enorme salto cuantitativo y cualitativo al negocio de V-Valley Europe, que se constituye en el nombre bajo el que se organiza el negocio de valor (Advanced Solutions) de Esprinet.
En su último año fiscal la facturación alcanzó los 561 millones de euros. El mayor porcentaje de negocio corresponde al negocio alrededor del centro de datos y las redes, que suma casi el 50 % de la facturación. A continuación se sitúa el software, con el 18,2 % (con GTI el peso crecerá hasta el 20,4 %). La seguridad suma el 12,9 % y el cloud representa un 3,5 % (su importancia crecerá hasta el 11,1 %).
La plantilla europea alcanza los 359 empleados, 111 en España y Portugal.