En el principio fue la virtualización del cómputo. Más tarde fue el almacenamiento. Y después se asaltó la red. Sin perder de vista la seguridad ni el cuidado del puesto de trabajo. En 20 años VMware ha recorrido un completo camino de transformación que la ha llevado, exigencias del mercado mediante, a fijar su vista en el desarrollo de los modelos del software como servicio (SaaS). Y con ellos, la apertura de su primer Digital Sales Center en el mundo, para el que la compañía ha elegido Barcelona. “Es un orgullo que se haya elegido España para establecer este centro que va a atraer talento digital; no solo español, que hay mucho, sino también de otras partes del mundo”, explicó María José Talavera, la máxima responsable de la compañía en España y Portugal. Sera el epicentro de la zona de EMEA que se convierte, de esta manera, en pionera de un proceso transformador hacia estos modelos SaaS, que la compañía espera que se conviertan en generadores del 20 % de su negocio en 2020. Un centro que aglutinará profesionales de distintas disciplinas (ventas, soporte, marketing, etc.) y creará cientos de empleos de manera progresiva.
Buenos números
La compañía mantiene un ritmo de negocio que en España no desentona un ápice con lo que acontece a nivel mundial. Talavera adelantó que, por segundo año consecutivo, la filial que dirige mantendrá crecimientos de doble digito en todos los trimestres de estos dos ejercicios. “VMware es el jugador clave en los centros de procesos de datos”, recordó. Un papel que, además, recordó que se ha extendido también, con los vientos del edge y del IoT, “fuera de él”. “Tenemos que medir los datos y la actividad que se genera más allá de estos centros de datos”.
La dualidad de este proceso transformador le ha llevado a evolucionar desde la tradicional virtualización en el cómputo (con su asentado VSphere), que hace un lustro generaba el 80 % de su negocio; hasta sus “nuevos” negocios vinculados con la virtualización en el almacenamiento y la red. “Ahora VSphere genera menos del 20 % de nuestra facturación”, contabilizó. A su juicio, el principal “culpable” de esta evolución ha sido NSX. “Somos lo que somos en la actualidad por NSX. Es una pieza troncal de nuestra estrategia”.
Verso libre, siempre
Nunca olvida Talavera remarcar la filosofía que se ha mantenido, incólume, a pesar de estos necesarios vientos de cambio. “Seguimos siendo una compañía independiente que ha hecho de la colaboración un arte”, insistió. “Nos hemos convertido en el nexo de unión entre el cliente y las herramientas con las que quiere trabajar”. Defienden, sin duda, y por encima de los sabores del hardware (se entienden con todos), su carácter multilogo y, como siempre, multicloud. “La libertad de elección del cliente marca nuestra estrategia”, asegura Talavera. “Cuanta mayor diversidad, mayor riqueza”.