La mitad de los usuarios españoles reconoce que no protege sus equipos con ninguna contraseña. Lo asegura un estudio que ha realizado Kaspersky Lab.
Un alto baremo que oscila desde el 45 % de imprudentes en el caso de los teléfonos inteligentes hasta el 50 % de los tradicionales ordenadores. Lo más desprotegido son las tabletas: el 56 % se abre sin más. Ahora bien, el 10 % de los españoles no hace uso de nada: ni de contraseña ni de ningún sistema de protección; un porcentaje que se eleva hasta el 21 % en el caso de las tabletas. Los imprudentes alcanzan el 12 % en el entorno de los ordenadores y el 13 % en smartphones. Alfonso Ramírez, director general de Kaspersky Lab Iberia, concluye, lógicamente, que nuestros datos no cuentan con la protección que se merecen. “Es importante que las medidas de seguridad se adapten para mantenerlos seguros, sin importar qué dispositivo o dónde lo utilicen”.
Una situación que choca con la percepción que tienen los españoles acerca del riesgo que provocan los maleantes, que es alta: el 74 % de los españoles coincide en que representan un alto riesgo para sus datos y el 63 % está convencido de que el malware es la principal amenaza.
Kaspersky asegura que el usuario parece que desconoce lo qué es una conducta imprudente y su impacto sobre los datos. El 48 % de los españoles reconoce que su propia falta de atención puede poner la seguridad de sus datos en alto riesgo. Al interrogar sobre cómo habían perdido sus datos, el 19 % admitió que los habían borrado de manera accidental.
Las medidas básicas contemplan, por ejemplo, contar con un respaldo en la nube, usar una contraseña (el usuario cuenta con gestores para facilitarlo) o la activación de conexiones VPN cuando usen redes inalámbricas públicas.