Toshiba celebra este año el 30 aniversario del portátil, el principal dispositivo que marca su paso en el mercado tecnológico. “Está en nuestro ADN seguir fabricando portátiles de calidad”, recordó José Sánchez, responsable de la oficina ibérica, que también recordó que las grandes compañías, como es el caso de Toshiba, están en una continua reestructuración.
En el lado profesional, Emilio Dumas aseguró que se va a concluir el año natural con parecida facturación que en 2015, “aunque con menos unidades comercializadas”, Una ecuación que evidencia que el precio medio de los portátiles de la marca se ha elevado entre el 8 y el 10 %. “Cada vez estamos más centrados en la comercialización de las gamas medias y altas”, insistió. “No vamos a por operaciones de volumen sino que nuestro objetivo es la rentabilidad”. Dumas recordó su foco en los segmentos verticales, como la educación, donde han visto oportunidad, sobre todo, en los centros privados y concertados. Tampoco ha sido un mal año en la Administración Pública, con un primer semestre bueno y una segunda parte del año con un negocio más parado, debido a las elecciones. “Toshiba cuenta con un negocio saneado y centrado en la rentabilidad”, resumió.
El apartado de consumo, responsabilidad de Pedro Moreno, también va a cerrar un año bueno. La prioridad era mantener el precio medio y, aseguró Moreno, se ha conseguido. A semejanza del apartado profesional, también se ha bajado el número de unidades comercializadas, por idéntica razón: no hay foco en gama baja, “Nuestra prioridad es el desarrollo de los productos de gaming, los dos en uno o convertibles y los ultraligeros Premium”. De cara a 2016, la marca va a poner en el mercado muchas novedades. “Y el precio medio va a tirar para arriba, lo que es bueno para Toshiba”.
El negocio relacionado con el almacenamiento ha cerrado muy buen año. Larry Martínez-Palomo, responsable de su desarrollo en Europa, apeló a sus cuotas de mercado en el segmento de los discos duros externos para señalizarlo: un 30 % en Europa y un 35 % en España. En 2016 esperan que elementos como la incorporación masiva del puerto USB-C o nuevos dispositivos relacionados con los teléfonos inteligentes y la nube tiren del negocio.