El aumento de los ciberdelincuentes y la comercialización de sus herramientas de ataque han convertido a las pymes en un blanco fácil y rentable. Por ello, no es de extrañar que las tendencias de las ciberamenazas que sufren estas empresas no difieran de las multinacionales, destacando el phishing, la ingeniería social, los ataques a la cadena de suministro, o el ransomware, entre muchas otras.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, las pymes se enfrentan a ciertas limitaciones de recursos y no disponen de un presupuesto suficiente para dedicar a la prevención de estos ciberataques. Algo que se pronuncia especialmente en tiempos de crisis económica o de altas tasas de inflación, cuando las empresas buscan recortar sus gastos, a menudo centrándose en su presupuesto para los departamentos de TI.
Los responsables de seguridad que subcontratan su ciberseguridad a los MSP estarán más preparados para estas amenazas. A diferencia de las pymes, que se centran sobre todo en su negocio principal, los proveedores de servicios de seguridad poseen mayores conocimientos especializados y experiencia en este campo, se mantienen al día de las últimas amenazas, tecnologías y las mejores prácticas de defensa, algo que puede resultar difícil para las organizaciones mantener internamente.
Hay que comenzar a ser conscientes de que existe una necesidad real para la ciberseguridad: el ransomware, el método más utilizado por los ciberdelincuentes, supone actualmente un riesgo importante para el 80 % de las pymes. Las organizaciones son vulnerables a los ciberataques no sólo en sus instalaciones, sino también cuando los empleados están de viaje o en casa. Por lo tanto, los responsables de seguridad deben asegurarse de que todos los vectores de ataque están cubiertos por las medidas de seguridad adecuadas.
Esto pone en evidencia la necesidad de un entorno centrado en la ciberhigiene. A medida que las empresas avanzan hacia entornos más seguros, deben estar alerta ante ciberdelincuentes cada vez más organizados. Para protegerse, es imperativo pensar primero en la prevención, y no en la detección. Cada día resulta más evidente que las pymes deberían recurrir a un MSP cuando dispongan de recursos limitados para invertir en la creación y gestión de un equipo de seguridad interno, o cuando busquen concentrar sus esfuerzos y recursos en sus objetivos empresariales estratégicos.
El futuro no apunta a ser mejor y el aumento de la actividad de ciberataques no hará más que crecer. Los ciberdelincuentes cuentan ahora con nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, fácilmente accesible para el público con herramientas como ChatGPT, que están acelerando ya el número y sofisticación de los ataques.
En 2022 se dio mayor énfasis a la conciencia en ciberseguridad en las empresas, debido a los problemas causados por la falta de seguridad en dispositivos móviles y el uso de redes personales para el trabajo. Sin embargo, todavía hay mucho por hacer, y es necesario que las pymes comiencen a adoptar una postura proactiva en ciberseguridad.