A pesar del complicado panorama mundial, Lenovo consiguió cerrar su primer trimestre fiscal, concluido el pasado 30 de junio, con un crecimiento del 7 % gracias a una facturación de 13.300 millones de dólares. Los ingresos netos aumentaron un 31 % hasta alcanzar los 213 millones de dólares.
Clave fue el comportamiento del negocio del PC y el que engloba a lo que la marca denomina como dispositivos inteligentes (PCSD), una de las dos unidades de negocio de IDG (Intelligent Devices Group). Esta parte del negocio registró un aumento de casi dos dígitos en los ingresos sumando 10.600 millones de dólares. Especialmente importante fue la rentabilidad que mejoró en casi un punto para establecer un baremo del 6,3 %. Los ingresos de esta parte, antes de impuestos, alcanzaron los 670 millones de dólares, lo que representa un crecimiento del 28 %.
El negocio de consumo creció un 45 %. Gracias a ello, los ingresos crecieron un 30 % en la región de EMEA con excelentes comportamientos, plasmados en crecimientos de dos dígitos, en lo que se refiere a los equipos prémium, donde se incluye el gaming, las gamas finas y ligeras y las opciones Chromebook.
Clave fue el crecimiento del 50 % en el negocio de comercio electrónico.
Tampoco desentonó la segunda unidad del negocio de IDG centrada en el desarrollo de los móviles, con un aumento de los ingresos del 33 %.
El negocio centrado en el desarrollo del centro de datos registró un aumento de ingresos de casi un 20 %, hasta alcanzar los 1.600 millones de dólares. El negocio vinculado con los poveedores de servicios en la nube creció por encima del 30 %.
Por último, los ingresos vinculados con el software y los servicios crecieron un 38 % superando los 1.000 millones de dólares, lo que suma un 7,6 % de la facturación
Los ingresos procedentes de Internet de las Cosas Inteligentes aumentaron un 39 %, la infraestructura Inteligente creció un 16 % y el negocio de verticales inteligentes aumentó un 65 %.