El Consejo de Ministro aprobó, en su reunión del pasado martes, la tasa digital. Este nuevo impuesto tiene como finalidad gravar las operaciones propias de la economía digital, que actualmente, se encuentran fuera del sistema tributario. Durante la rueda de prensa posterior al consejo María Jesús Montero, ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, defendió la necesidad de que el sistema fiscal español sea “más justo y redistributivo”.
La declaración de ingresos no se realizará hasta, al menos, el 20 de diciembre de 2020, en este primer año. La ministra ha explicado que esta decisión da un mayor margen para que se pueda alcanzar un acuerdo internacional sobre el tributo y facilita que las empresas se puedan adaptar a él. Esta tasa es aplicable a tres conceptos:
- La prestación de servicios de publicidad en línea
- Los servicios de intermediación en línea
- La venta de datos generados a partir de información proporcionado por el usuario
Opiniones en contra
Con esta aprobación el gobierno de Sánchez se ha puesto en contra a algunas asociaciones. Como es el caso de Adigital (la Asociación Española de la Economía Digital), que ha advertido de las duras consecuencias para la economía española que se derivarán de su aplicación unilateral.
Desde Adigital, han añadido que con la tasa digital supondrá para las empresas españolas una fuerte pérdida de competitividad, provocando la fragmentación del mercado único digital, paralizando las inversiones en España y aislando al país del contexto digital global.
En este punto, la Asociación aboga por una regulación aceptada y consensuada a escala global. Así como la necesidad de abordar un debate dirigido a la adecuación del marco regulatorio a la economía digital en particular. Pero dicho debate debe celebrarse desde el punto de vista internacional y nunca de manera unilateral.
Por otro lado, Adigital ha querido recordar que en el pasado se adoptaron medidas fiscales similares y demostraron generar una fuerte inseguridad jurídica para los ciudadanos, empresas e inversores. Además, esta solución transitoria puede ser un claro obstáculo para la participación del país en el debate internacional.
Otra de las voces que también se han mostrado en contra de la aprobación de la tasa digital es Ametic. La patronal ha mostrado en numerosas ocasiones su rechazo y preocupación por el impuesto sobre determinados servicios digitales. El pasado mes de septiembre Francisco Hortigüela, director general de Ametic, ya afirmó que este impuesto “penalizará a la industria digital, el principal sector generador de crecimiento y empleo”.