Presume Sergio Reiter, product manager de los Primergy de Fujitsu, que la compañía, “a pesar de la que está cayendo”, sigue alargando su oferta de máquinas apuntadas al segmento x86. Aprovechando el arranque de los nuevos motores de Intel, los Xeon E5-2400 v2, Fujitsu ha completado sus opciones de servidores con una nueva máquina —en rack, la Primergy RX2520 M1— y la renovación de las opciones en blade —con la BX920 S3— y en torre —TX2540 M1—.
Nada mejor que aprovechar las ventajas que ofrece la “familia” de procesadores E5, que en su sabor 2400 se ubican dentro del segmento de máquinas de “propósito general, con 2 ó 4 procesadores, con mayor capacidad de flexibilidad y para todo tipo de aplicaciones”, relata Antonino Albarrán, director de tecnología de Intel. Responden, por tanto, al segmento de entrada, “con un precio ajustado que no pierde en prestaciones”.
La máquina que Reiter califica de “completamente novedosa”, la RX2520 M1, se presenta con un nuevo chasis —lo que no es óbice para cumplir con la premisa, obligatoria, que se marca Fujitsu de la compatibilidad con la base instalada—, una mayor capacidad de disco y con el obligado entendimiento con las necesidades de virtualización de las pymes; a las que lógicamente va dirigida. Reiter presume que en las opciones de torre la marca cuenta con una de las gamas más extensas del mercado. “Somos la segunda compañía que más vende a través del canal”. Unos resultados que, junto a la novedad que supone esta máquina, le hacen pensar que es posible doblar las ventas en este segmento de opciones rack.
La pareja restante representa una evolución de lo que ya tiene la marca. La opción en torre ha mutado su chasis lo que otorga más capacidad de almacenamiento y mayor rendimiento en sus discos. Y dependiendo del modelo, puede llegar a 24 ó 48 TB de capacidad. La opción blade, BX920 S3, que es una máquina de doble socket, presume de más memoria y más cores. Reiter asegura que su campo mejor de acción es el terreno de las aplicaciones críticas, la gestión de la virtualización y los servicios de infraestructura. Las expectativas de la pareja son más modestas que la opción novedosa en rack. “Al sustituir a la oferta actual, las oportunidades se sitúan en la migración de la base instalada”.