“Es una revolución”. Eugenio Jiménez, storage business product manager de Samsung, está convencido de que la nueva opción de la marca en el mercado del almacenamiento, el Samsung Portable SSD T1, se convertirá en el “sustituto natural de los discos duros convencionales”.
Una nueva opción que se presenta como un SSD portátil, veloz, potente y que sólo pesa 28 gramos. Apenas un poco más grande que una memoria USB, si se le añade el clave de conexión al ordenador, el peso se “eleva” hasta poco más de los 60 gramos.
La velocidad de transferencia, que alcanza los 450 MB por segundo; y la seguridad se sitúan como las dos principales bazas de este disco SSD. “Apenas hay tiempo de respuesta entre las órdenes del usuario y la respuesta del dispositivo”. Dependiendo del tamaño del fichero, y según asegura la marca, el dispositivo posee una velocidad de transferencia de datos cuatro veces más rápida que un HDD externo. Emplea solo 8 segundos en transferir una película de 3 GB y 27 segundos para una película de 10 GB, frente a un HDD externo, que tarda, respectivamente, 26 segundos y 85 segundos.
El interfaz de usuario es sencillo por lo que resulta fácil de configurar según sus necesidades. Es posible establecer una contraseña de acceso gracias a la encriptación AES 256-bit del hardware. A diferencia de un HDD externo, no cuenta con elementos móviles, por lo que puede resistir a los golpes y caídas (resiste golpes de hasta 1.500 G/0,5 ms e incluye Dynamic Thermal Guard, que se activa en condiciones de temperatura extremas). Y es compatible, lógicamente, con los entornos Windows y Mac. Es posible encontrarlo en 3 opciones: 250 GB, 500 GB y 1 TB.
No es la única opción de la marca ya que junto a este nuevo SSD portátil, se han presentado las tarjetas de memoria Micro SD EVO Plus y EVO PRO Plus.