Lo asegura IDC que ha realizado un ejercicio de previsión que alcanza hasta el año 2022 con 2019 como el ejercicio del cambio de tendencia: tras declinar un 0,3 % en 2017, la consultora prevé que esta tendencia continúe a lo largo de este año (calcula un decrecimiento del 0,2 %) y cambie a partir de 2019 con un ascenso anual del 3 % alcanzando en 2022 los 1.654 millones de unidades, con un crecimiento del 2,5 % en esos cinco años. Para ver la progresión en 2016 el número de unidades se situó en 1.469 millones, con un ligero decrecimiento en 2017 (1.465 millones) y los 1.462 millones previstos en 2018.
Una de las razones que explican el decrecimiento de 2017 fue China cuyo mercado cayó un 4,9 %. Las previsiones, antes del ascenso de 2019, es que en 2018 caiga un 7,1 %.
La introducción del 5G en este mercado será un revulsivo. IDC cree que las primeras unidades con esta tecnología aparecerán en la segunda mitad de 2019, con opciones en la mayor parte de las regiones en 2020. La consultora prevé que el 7 % de los teléfonos contarán con esta tecnología en 2020 (212 millones). Una cuota que crecerá hasta el 18 % en 2022.
Anthony Scarsella, research manager de la consultora, apunta, sin embargo, que a pesar de este descenso de las unidades, el precio medio en 2018 crecerá un 10,3 % (pasa de 313 dólares a 345). “Continuará el foco en los dispositivos de alta gama”, asegura. La previsión es que este precio medio continúe creciendo: a final de 2022 se situarà en 362 dólares.
Android sigue siendo la plataforma líder y se espera que mantenga su peso en torno al 85 %. Se espera que en 2022 alcance unas ventas de 1.410 millones.
El volumen de iOS crecerá un 2,6 % en 2018 (221 millones), llegando a los 242 millones en 2022.