En un 2,9 % calcula IDC la caída del mercado de los teléfonos inteligentes en el primer trimestre. Una caída que tiene en China el principal responsable con unas ventas por debajo de los 100 millones de dispositivos, algo que no sucedía desde el tercer trimestre de 2013. Las ventas mundiales de este primer trimestre alcanzaron los 334,3 millones (hace un año el baremo se situó en 344,4 millones).
Melissa Chau, associate research director de la consultora, explica que hay una mayor venta de dispositivos premium pero no de nuevos dispositivos. «Cuando analizamos el mercado desde el punto de vista del valor, el mercado sigue subiendo y seguirá creciendo a lo largo de los años ya que los consumidores dependen cada vez más de estos dispositivos para la mayor parte de sus necesidades”.
Anthony Scarsella, director de investigación de la consultora, recuerda que a pesar del lanzamiento en este trimestre de los dispositivos más altos de marcas como Samsung y Huawei; que se unió a la comercialización masiva del iPhone X, los consumidores no han realizado las compras previstas. «La abundancia de dispositivos de alta gama, que se han producido en el último año y medio, han provocado un parón en el ciclo de actualización de estos dispositivos. Los consumidores parecen que no están dispuestos a invertir en un nuevo dispositivo que exhibe mínimas actualizaciones en relación al dispositivo que adquirieron”. De cara al futuro, cree que los dispositivos Premium más asequibles “podrían ser la solución que el mercado necesita en la segunda mitad del año para impulsar la venta”.
En el ranking, Samsung mantiene el liderazgo con una cuota del 23,4 % (más de 78 millones de dispositivos) a pesar de su descenso, mínimo, del 2,4 %. Apple, segunda, cuenta con una cuota del 15,6 % y crece un 2,8 %. Huawei, que vendió más de 39 millones de teléfonos, atesora el 11,8 % del mercado y creció un 13,8 %. Xiaomi es cuarta: vende 28 millones de aparatos y ascendió un 87,8 %.