Los ingresos de la industria del software crecieron un 2,7 % en 2020, mientras que la economía decrecía un 3,3 % por la covid-19. Este crecimiento del software es, según apuntan desde McKinsey, una tendencia en la última década, cuando el sector creció al doble de la tasa de todas las industrias. Siguiendo esta línea, tal y como se desprende de una encuesta cualitativa con 20 CEO de compañías europeas de software elaborada por la firma, se espera que la industria del software crezca a más del doble del ritmo del PIB mundial en los próximos cinco años.
“Para conocer las líneas de actuación de futuro del sector en Europa, hemos entrevistado a 20 CEO de compañías europeas de software. De esta encuesta cualitativa extraemos una serie de soluciones centradas en la industria del software y, por otro lado, prácticas de buena gestión que se aplican en otros mercados”, explica Alberto Torres, socio y líder de la práctica europea de software de McKinsey.
En Europa solo el 7 % de las empresas más valiosas del continente pertenecen actualmente a la industria del software, mientras que en todo el mundo siete de las diez empresas más valiosas eran empresas de software o relacionadas con el software, por ello, desde McKinsey han hecho el ejercicio de analizar cuáles son las áreas de oportunidad de crecimiento del sector del software en el viejo continente.
La consultora ha llegado a la conclusión de que hay tres áreas de oportunidad que son: el software vertical B2B, las plataformas de software para la digitalización de las pymes y las plataformas horizontales construidas sobre la excelencia europea en I+D.
Por otro lado, en cuanto a las consideraciones de los CEO encuestados la principal conclusión que apuntan es que es necesaria una colaboración más estrecha entre inversores y empresas con las universidades e instituciones de investigación, para que como resultado estas investigaciones básicas se traduzcan en valor económico y liderazgo en el mercado.