Check Point ha alertado del incremento global de los ciberataques a centros educativos y de investigación tanto en Europa como en Estados Unidos y Asia. En Europa se ha registrado un incremento del 24 % de ataques semanales en julio y agosto, pasando de 638 a 793, mientras que la tasa de ciberataques dirigidos contra el resto de los sectores se incrementó en un 9 %.
En Estados Unidos el incremento alcanzó el 30 % entre julio y agosto, lo que contrasta con el aumento del 6,5 % de los ataques que sufrieron el resto de sectores. Y en Asia, el incremento se cifró en el 21 %, frente a la tasa de ataques del resto de sectores que creció un 3,5 %.
Los ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS) son los más habituales en Estados Unidos, mientras que en Europa también se han detectado intentos de divulgación de información que están dirigidos a adquirir información específica del sistema sobre un sitio web, incluida la distribución de software, los números de serie, etc. Esto es porque cuanta más información se conozca un cibercriminal sobre un sitio web, más fácil será comprometer el sistema.
En Asia, además de los ataques de denegación de servicio, se produjeron otros ejemplos de explotación de vulnerabilidades de seguridad como la ejecución de código remoto o la divulgación de información.
«La pandemia del coronavirus ha afectado no solo a la implementación del teletrabajo, sino que también ha cambiado la forma en la que se imparten las clases a distancia. Estas cifras son sorprendentes y queda clara una tendencia preocupante: los cibercriminales consideran a los estudiantes como blancos fáciles. Estos ataques pueden abarcar correos electrónicos de phishing maliciosos, «Zoombombing» e incluso ransomware”, alerta Omer Dembinsky, director de inteligencia de datos de Check Point.
Ante esta situación Check Point aconseja a los estudiantes online apagar o bloquear las cámaras y los micrófonos cuando no se está en una clase virtual; hacer clic solo en enlaces de fuentes de confianza; usar contraseñas seguras y no compartir nunca información confidencial.
A los padres les recomienda hablar con sus hijos sobre el phishing, denunciar el ciberacoso, vigilar los dispositivos y establecer controles parentales.
El proveedor aconseja también a los centros educativos contar con antivirus en todos los equipos, establecer cortafuegos y gateways de acceso a Internet para proteger las redes escolares de los ciberataques, revisar todas las plataformas de terceros que utilizan y supervisar el sistema constantemente.