Las ventas de portátiles a través del canal de distribución podrían volver a crecer en el segundo semestre del año si los problemas de suministro se alivian y los desafíos del coste de la vida tienen un impacto reducido, según se desprende del último análisis de Context.
El informe subraya que la demanda de portátiles sigue impulsando el mercado de los ordenadores personales, que debería seguir siendo alta, especialmente en el sector profesional. Sin embargo, según el estudio de la consultora, las organizaciones están siendo más exigentes en sus compras y la incertidumbre económica y geopolítica podría afectar a las ventas de los consumidores.
Para la consultora, la oferta y la demanda siguen siendo una cuestión clave. Hay más productos disponibles que el año pasado: los distribuidores europeos tienen entre 7 y 9 semanas de existencias, pero esto no es siempre suficiente.
“Algunos productos que llevan muchos meses en tránsito están caducados cuando llegan. La guerra de Rusia en Ucrania y los cierres provocados por el covid-19 en Asia han añadido mayores costes a la cadena de suministro. Sin embargo, hay algunos aspectos positivos. La migración a Windows 11 impulsará las ventas de PC en la segunda mitad del año, al igual que un mayor apetito por productos más sostenibles y seguros”, explica Marie-Christine Pygott, analista principal de Context.
Teniendo en cuenta todos estos factores, Context ha elaborado dos previsiones para el próximo año. La primera se basa en un escenario pesimista en el que la oferta mejora, pero la desconexión entre la disponibilidad de productos y la demanda continúa. La demanda de ordenadores de sobremesa sigue siendo débil y los factores económicos, como la inflación, perjudican la demanda de los consumidores y de los comercios. En este caso, podríamos ver un decrecimiento de la informática móvil del 21,7 % en este segundo trimestre, que se alargaría en el tercero, con un descenso del 1 %, y volvería a tener valores positivos en el cuarto trimestre y en el primero de 2023. En el caso de los ordenadores de sobremesa, el decrecimiento pasaría del 5,6 % en el segundo trimestre al 6,9 % en el tercero, antes de volver a subir, aunque no a niveles positivos.
El segundo escenario de Context es el optimista: imagina mejoras en la oferta y en la demanda de ordenadores de sobremesa, caídas de precios, venta del exceso de existencias del segundo trimestre y factores económicos con un impacto menor. En esta situación, el decrecimiento del 7,1 % de las ventas de unidades de portátiles en el segundo trimestre se tornaría en un ascenso del 10,9 % en el tercer trimestre, antes de estabilizarse en el cuarto trimestre y de caer en el primer trimestre de 2023. El decrecimiento de los ordenadores de sobremesa rondaría el 2,3 % en el segundo trimestre y se mantendría en un nivel similar (una caída del 2,7 %) en el tercer trimestre, antes de tornarse en ascenso en los dos trimestres siguientes.