A pesar de que el desarrollo de los servicios gestionados marca el futuro del negocio del canal, todavía hay muchos distribuidores que exhiben grandes recelos en este apartado. Un panorama que, desde hace dos años, Save4Print pretende cambiar acercando al canal una potente plataforma de servicios gestionados, que acaba de estrenar su segunda versión, para que puedan ofrecer a sus clientes esta opción. “El cliente final está demandando este tipo de servicios”, asegura Miguel Ángel Guisado, CEO de Save4Print. “Y en nuestro caso, apostamos por desarrollar una plataforma, atendida y gestionada por un personal cualificado, con unas herramientas específicas capaces de ofrecer el servicio que requiera cualquier tipo de empresa”.
Tras dos años de recorrido, la compañía cuenta con cerca de 600 distribuidores, de todo tipo y condición. “Cualquier distribuidor que quiera desarrollar este tipo de servicios puede acudir a nuestra plataforma”, asegura. Guisado reconoce que todavía hay mucha reticencia en el canal a desarrollar este tipo de negocio. “Hay distribuidores que se han metido en este negocio sin tener controlado el alcance real de estos servicios, lo que ha provocado que su experiencia haya sido negativa”, explica. “No es fácil que vuelvan apostar por este negocio; sin embargo, desde Save4Print les garantizamos una herramienta de ventas y un servicio”. En 2018 la compañía ha llevado a cabo una segmentación de su canal a través de un programa, Program4Partner, dividido en tres niveles (Elite, Premium y Business), diferenciados en virtud del compromiso con la empresa.
Recién certificados en la norma ISO de calidad, Guisado asegura que se encuentran en la mejor posición posible para salir fuera de España y ofrecer esta plataforma en otros países donde está el grupo. “Ahora bien, la central está en España”, puntualiza. “Aunque es una plataforma que cuenta con la potencia y las prestaciones adecuadas para servir al canal y a los clientes de cualquier país de Europa”. Lo único que faltaría seria la fuerza comercial porque las impresoras, como asegura, “hablan todas el mismo idioma”.