TP-Link ha mantenido una trayectoria creciente en el mercado ibérico. Desde los 6 millones de euros que cosechó en 2012 hasta los casi 32 millones que se alcanzaron el pasado año. Una cifra, esta, que supuso un crecimiento de casi el 8 %. En 2018 Álvaro Ausín, director de canal de TP-Link en España, asegura que la filial acabará creciendo entre el 8 y el 10 %, lo que les permitirá moverse torno a los 34 o 35 millones de euros. “Hemos sustentado el negocio en el entorno de la pyme, donde ha destacado, sobre todo, el wireless profesional; y en el área de la telefonía, que ha experimentado en 2018 un enorme crecimiento”.
La pyme es su corazón de negocio. Ausín asegura que la pyme está apostando por tecnologías muy fiables y robustas pero que también sean más efectivas y con un precio un poco más ajustado. “Por ejemplo, hay puntos de acceso profesionales con un precio que ronda los 100 euros cuando hace unos años, el coste estaba en 600 o 700 euros”. Algo que también sucede en un producto tan en boga como los switches POE de capa 2 cuyo precio ya está por debajo de los 200 euros cuando hace tres años no bajaban de los 500 euros.
Este área de la empresa supone el 30 % del negocio de TP-Link; un porcentaje que alcanza el 40 % si se añaden los productos de consumo que se integran en los proyectos de empresa. Ausín señala dos áreas de especial crecimiento en 2018: los puntos de acceso profesionales que gracias a la controladora que presentó la marca ha crecido un 67 % y el área de los switches POE.
El canal es pieza básica en el desarrollo de las redes. Hace año y medio se puso en marcha el Partner Program del que forman parte 80 empresas. Ahora la marca ha anunciado un programa de certificación (TPNA). Ausín asegura que ha sido el canal el que ha demandado esta iniciativa. “La hemos lanzado en inglés, en esta primera fase”, especifica. Se trata de una iniciativa centrado en el desarrollo del producto para las pymes y que cuenta con una formación online y otra parte presencial.