A pesar de su madurez, la impresión sigue ofreciendo muy buenas oportunidades de negocio. La demanda de los consumidores, que exige dispositivos con muchas más prestaciones, abre camino a la rentabilidad de los fabricantes y del canal. José Ramón Sanz, responsable de marketing de producto de Brother, alienta a que los distribuidores estén atentos a los “nuevos” segmentos que se abren en este apartado como es el caso de la impresión de etiquetas y códigos de barras o las oportunidades relacionadas con la digitalización y la conectividad de los equipos.
El responsable de marketing de producto realiza un buen balance del negocio de Brother en la primera parte del año. En el segmento de la impresión más “convencional” reconoce que cada vez tienen más peso los servicios gestionados. “Está creciendo la demanda del canal por ofrecérselos a sus clientes”, reconoce. Brother cuenta con una oferta a medida, a través del programa “Partner MPS”, para que su canal se incorpore a este modelo. “Le suministramos una serie de soluciones para que puedan ofrecer sus programas de pago por uso”, explica. En el último año Brother ha creado una plataforma que permite a los distribuidores gestionar sus contratos y la explotación del servicio. “Les permite incorporar sus propios servicios e incluso solicitar el apoyo de una financiación”. La base actual de distribuidores adscritos al programa Partner MPS alcanza los 300.
Junto al tirón de los servicios gestionados, Sanz señala el enorme crecimiento que está experimentando la impresión vinculada con los códigos de barras y las etiquetas. Un mercado que según la consultora Gfk está creciendo a ritmos del 35 % en la primera mitad del año en España. “En nuestro caso, estamos superando ese baremo”, asegura. La marca goza de una cuota del 40 % en el canal en el segmento en el que se engloban los escáneres documentales, las impresoras de etiquetas y las rotuladoras electrónicas.