El pasado jueves se celebró el Día Internacional de la Mujer, una jornada que comenzó a celebrarse en 1911, un año después de que la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas reunida en Copenhague proclamará el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer, a propuesta de la política alemana Clara Zetkin, y cuyo objetivo era promover la igual de derechos, incluyendo el sufragio para las mujeres.
En este momento, más de un siglo después, este día sigue siendo necesario porque no se ha logrado la plena equiparación salarial ni profesional de la mujer. En el sector TIC también queda mucho camino por recorrer y, aunque hay un grupo de directivas a la cabeza de destacadas compañías tecnológicas, la presencia de la mujer todavía no es mayoritaria. Entre las razones de esta brecha se encuentran desde la menor proporción de tituladas en estudios STEM hasta la falta de medidas para conciliar la vida familiar y profesional.