En plena vorágine digital, asegurar la continuidad de los negocios es clave. Un reto al que dirige todos sus esfuerzos de negocio Vertiv, con una oferta, completa, que va mucho más allá del SAI y que alcanza no solo los centros de datos (tanto los grandes como el edge); sino también el área de las telecomunicaciones, con el 5G como gran vector de impulso a partir de 2020 y el apartado industrial, con la industria 4.0 como enorme oportunidad. José Alfonso Gil, country manager de Vertiv en España y Portugal, asegura que los campos de oportunidad en este 2019 alcanzan este trío de áreas.
El entorno de la continuidad energética y el mercado relacionado con el SAI es uno de los apartados que, a semejanza de lo que ha ocurrido en otros segmentos, ha vivido una considerable concentración. ¿Cómo observa el panorama actual?
Es cierto que ha existido una gran concentración pero también han aparecido nuevos competidores, que están haciendo una presión sobre el mercado, principalmente en el precio, pero también en el desarrollo de nuevos productos con mayor eficiencia y rentabilidad para el cliente. Sin embargo, no solo se ha producido esta consolidación en el entorno del SAI, sino que este elemento se ha consolidado con el resto de las infraestructuras críticas que están presentes en el centro de datos. Por tanto, hay pocas compañías que se dediquen, de manera exclusiva, al SAI, ya que la tendencia ha sido proporcionar soluciones completas al cliente más allá de este producto.
Vertiv es un ejemplo de esta concentración. Con una dilatada estrategia de adquisiciones, ahora ya se exhibe como una única compañía. ¿Ya se ha completado esta integración? ¿Se vio afectada la capacidad de desarrollo tecnológico durante el proceso?
La última gran compra que se realizó fue en 2010 con la adquisición de Chloride. Nunca es sencillo integrar dos compañías pero, en nuestro caso, este proceso ya ha terminado. Ya tenemos integrada la compañía, con los departamentos trabajando de manera conjunta y con una estrategia común. A través de la división de mercados verticales se desarrolla la cercanía al cliente que solo es posible si se tiene integrada la compañía.
De cualquier manera, durante el proceso de integración se siguió desarrollando producto. Precisamente una de las razones principales de la compra de Chloride fue que contaba con un producto puntero y que permitió a Emerson (en aquel momento) colocarse, de nuevo, en lo más alto del desarrollo tecnológico. En ningún momento se redujeron los centros de producción ni los dedicados al I+D+i que siguieron desarrollando productos de manera ininterrumpida.
¿Qué falta ahora? ¿Quizás potenciar la imagen de marca?
Es cierto que la marca no es demasiado conocida y suenan más las compañías compradas. Hay que mejorar la promoción de nuestra marca y es un objetivo en el que nos estamos concentrando este año. Y que también seguiremos insistiendo en los próximos.
Las previsiones eran cerrar un buen año fiscal a finales del pasado mes de diciembre en España gracias, sobre todo, al crecimiento del negocio centrado en los centros de datos, la reactivación de ciertos proyectos y el famoso edge. ¿Fue así? ¿Qué balance se puede hacer del negocio el pasado año?
Tuvimos un buen año a pesar de que algunos proyectos se han retrasado a este año. Incluso algunos se cerrarán en 2020. Algunos players de este mercado habían anunciado su llegada a España pero parece que ésta se está retrasando. Nuestro primer trimestre de 2019 también ha sido muy bueno, por encima de las previsiones. Y no solo en España sino también a nivel general.
De las tres áreas en las que se divide la oferta: los centros de datos, las redes de comunicaciones y los segmentos comerciales e industriales, ¿cuáles son las que mejor están funcionando?
El centro de datos está en claro crecimiento. El desarrollo del cloud y la llegada de los grandes colocation, con sus grandes inversiones, está empujando este ascenso. Por otro lado, las telecomunicaciones representan un mercado estable y en el que estamos esperando la llegada del 5G que va a permitir, junto al desarrollo de los grandes centros de datos, la aparición de centros más pequeños para recoger toda la información; lo que impulsará el edge computing. Y las compañías, a pesar de que el 5G no ha llegado, se están preparando para ello.
Por último, en el entorno comercial e industrial, que es en el que menos presencia tenemos, esperamos crecer de manera importante por el desarrollo de la industria 4.0, que no solo alcanza al entorno de la fabricación sino a toda la cadena de compra. Va a tener un crecimiento brutal en los próximos años.
Además del SAI, la oferta se compone de equipos de alimentación en continua, los equipos de aire acondicionado de precisión, la monitorización y los servicios. Sin embargo, ¿sigue siendo el SAI el centro del desarrollo tecnológico de Vertiv?
El desarrollo de cada uno de nuestros productos es independiente, con especialistas en cada uno de las líneas que se ajustan a lo que los clientes demandan y a las tendencias que se observan en el mercado. El edge va a crecer exponencialmente a ritmos del 40 % en los próximos años y también en el entorno de los colocation ya que las empresas están llevando sus cargas a este tipo de compañías para reducir sus costes. Junto a ellos, es cierto que durante un tiempo van a seguir existiendo centros de datos de tamaño mediano que requieren de soluciones globales que integran un rack, un SAI y un equipo de aire acondicionado; este tipo de centros sí exige el desarrollo de una solución global. Por ello se creó un centro de expertise especializado en este tipo de soluciones completas.
Frente al desarrollo de los grandes centros de datos, se prevé una enorme oportunidad en el área del edge. Sin embargo, las empresas de colocation aseguran que van a absorber la mayor parte de las cargas. ¿Cómo observa el desarrollo futuro del mercado?
Observamos un gran crecimiento tanto en el mercado del edge como en el entorno de los colocation. No son entornos enfrentados. Y para explicarlo podemos apuntar al desarrollo, por ejemplo, del vehículo autónomo que será una realidad. Cuando viajemos en ellos, será necesario, para asegurar una conducción segura, que el análisis de los datos que genera el vehículo se realice de forma rápida y en centros cercanos a él para permitir la toma de decisiones de manera automática. Nuestras redes de comunicación no tienen suficiente velocidad ni capacidad; y tampoco la tendrán con el 5G, para permitir que el análisis de los datos, y la posterior decisión, se realicen en centros de datos alejados del vehículo, que sí serán válidos para acumular toda la información para dar un mejor servicio y asegurar que se toman las decisiones más acertadas. La latencia es vital y lo va a ser mucho más.
El edge estará centrado en un entorno concreto que necesita una latencia mínima. Los grandes centros y el edge no son entornos opuestos sino mundos que van a tener que crecer juntos.
Sin embargo, estos centros defienden que el 5G va a permitir estas transmisiones casi instantáneas a pesar de que los centros no estén cercanos a la información…
Aunque el 5G asegure una alta velocidad de subida y bajada de datos, hay que tener en cuenta el tráfico que circule por la red en cada momento. Se calcula que en 2021 habrá 23.000 millones de dispositivos conectados lo que determinará que el tráfico será brutal y la red no tendrá tanta capacidad para que los datos vayan y vuelvan a la velocidad que exigen las empresas. No es que no sea factible a nivel tecnológico sino por su falta de capacidad.
Entonces, ¿prevé que lo que se reduzca sean los centros de datos medianos, alojados en la sede de las empresas?
Sí. Es una tendencia que en España todavía no vemos por nuestra preferencia por tener nuestro centro de datos cerca de nuestro negocio; pero irá pasando porque alojar las cargas de manera externa reduce costes. También hace cinco años nadie pensaba tener alojadas sus cargas en la nube y ahora es una tendencia cada vez más creciente.
En el caso del edge, ¿las empresas valoran de manera adecuada el papel crítico que tiene la eficiencia energética en las soluciones que implanten?
El edge va a ser un mercado muy importante en los próximos años. Y debe contar, de manera obligada, con la continuidad. No es admisible ningún parón en estos centros pequeños, independientemente de su ubicación, lo que exige contar con una solución completa. Por tanto, empresas como Vertiv van a tener un papel importante en el desarrollo de este entorno. Y en nuestro caso, va a ser fundamental la participación de nuestros partners. El edge simboliza la democratización de los sistemas informáticos, lo que va a permitir que muchos clientes lo vayan a adoptar. Vertiv no pretende acercarse a esos clientes de manera directa; es una labor que puede realizar nuestro canal para darles una solución completa. Su labor va a ser vital para que podamos jugar un papel relevante en este entorno.
¿Cuenta Vertiv con una oferta completa para el edge?
Sí. Contamos con racks, SAI, PDU, aíre acondicionado y sistemas de monitorización a distancia. Una oferta que estamos lanzando principalmente a través del canal porque creemos que es el camino natural para este tipo de soluciones.
Hace años, sin embargo, el SAI parecía tener un papel secundario en el entorno TIC. ¿Cómo observa su evolución en el papel que juega en la infraestructura TIC de las empresas, tanto de las pequeñas compañías como de las grandes? ¿Ha ganado peso en las partidas de inversión?
Hace muchos años el SAI era una solución que utilizaban solo las grandes compañías pero la informática se extendió para alcanzar a cualquier tipo de empresa que era consciente de lo importante que es mantener la continuidad, lo que ha permitido que todo el mundo conozca el papel esencial del SAI en sus sistemas TIC.
En el caso de los colocation se está produciendo un cambio importante gracias al uso de las energías renovables que están cobrando fuerza en el mundo. Este tipo de energía exhibe “picos” en su producción que no son manejables; algo que no sucede con las fuentes tradicionales. Por tanto, se van a necesitar sistemas, con baterías, que sean capaces de gestionar la red, “aportando” o “retirando” energía dependiendo de las necesidades. Los grandes colocation, con su enorme capacidad energética, pueden realizar esta tarea, cobrando por ello. Y ese es un mercado que está llegando, que ya se está desarrollando en algunos países y que va a provocar un cambio muy importante en el concepto que tenemos del SAI. Va a pasar a ser un elemento activo, capaz de tomar la decisión de si recoger energía o si entregarla; generando además un ingreso adicional. En lo que se refiere a los SAI más pequeños, se pueden establecer cluster que reciban todos una misma señal y una misma orden al mismo tiempo. Y los SAI de Vertiv están preparados para responder a este nuevo concepto.
¿Se convertirá España en un centro neurálgico para instalar los grandes centros de datos?
Tenemos una nueva oportunidad para atraer estas inversiones. A la península ibérica están llegando tres cables de fibra óptica: uno que desde África llega a Valencia, otro que desde Norteamérica llega a Bilbao y el que viene desde Sudamérica que accede desde Lisboa. Tienen una capacidad enorme y todos llegan hasta Madrid que podría convertirse en un centro neurálgico muy importante si somos capaces de subirnos a ese tren.
¿Y qué necesitamos para no perderlo?
Lo primero es no asustar a las empresas tecnológicas y facilitarles la llegada. Además capital humano, de alto valor, capaz de diseñar y construir esos centros de datos y llevar a cabo su operación. Y, por último, inversiones en infraestructuras, principalmente eléctricas.
La compañía ha manifestado la apuesta decidida por el canal de distribución. Así se ha manifestado desde la corporación para hacerlo llegar a todas las filiales. ¿Qué marca la estrategia con el canal?
Se ha lanzado un nuevo programa de canal que, por los incentivos que tiene, es el programa de canal más atractivo que hay en el mercado. Estamos apostando, por primera vez en la empresa, por crear un canal amplio, fuerte y en el que nuestros productos tengan una salida real; y no solo el SAI, sino también el resto de la oferta.
Tras el primer trimestre fiscal, que se ha concluido con crecimiento, ¿qué va a ser clave para poder mantener estos resultados hasta el final del año?
Va a ser muy importante que los grandes proyectos que tenemos sobre la mesa en torno a los centros de datos vayan adelante y no se retrasen. Vertiv tiene un gran posicionamiento en el entorno de los grandes centros de datos y contribuyen de manera significativa al objetivo. Además es muy importante el entorno industrial donde tenemos proyectos muy interesantes y el mundo de las telecomunicaciones, que tiene un peso vital. La inversión de 5G no va a ser este año pero es muy importante la fase de preparación con el desarrollo de los pequeños centros de datos; que va a resultar clave también para conseguir nuestra cifra de negocio.