Tras más de tres décadas en el mercado de la ciberseguridad, Check Point Software disfruta de un conocimiento, alimentado diariamente, alojado en Threat Cloud, una base de datos inmensa, dotada de inteligencia gracias a los más 50 motores de machine learning, “capaz de detectar la mayoría de los ataques que ocurren en el mundo”, explica Gabriela Zornoza, comercial especialista en TI y Cloud de Check Point Software. Junto a esta base de datos, el fabricante cuenta con Check Point Research, un equipo de investigación para detectar y responder a los nuevos ataques.
En el ámbito de la inteligencia artificial, Gabriela Zornoza distingue tres aspectos: como víctima, como amenaza y como herramienta. En la primera acepción, recuerda que para utilizarla y crear un modelo basado en ella, se necesitan muchos datos. “Cuanta más protección tengan, más protegida estará la IA”. No olvida recordar su uso por parte de los ciberdelincuentes. “Los ataques creados con IA son mucho más complejos y sofisticados; pero también la podemos utilizar para que nos ayude a detectar mejor las amenazas y para mejorar el trabajo de los profesionales de la seguridad”. La marca cuenta con Infinity Copilot, un asistente que ayuda en las labores de seguridad.