Defiende Xavier Moreno, director de marketing y canal de Ricoh, que la compañía ha tenido, desde hace décadas, una visión a largo plazo del puesto de trabajo que, sin olvidar la impresión, foco especial de negocio, le ha permitido desplegar una oferta mucho más completa gracias a un proceso de transformación y de diversificación del negocio que le ha llevado a estructurar su actividad en tres áreas: Digital Workplace, Cloud & Cyber y Process Automation.
Moreno recuerda que la compañía ha acometido su incursión en otras tecnologías, en alguna de ellas de manera orgánica: en 2007 ya empezaban con el desarrollo de la gestión documental y en 2010 iniciaban el despliegue de servicios de infraestructura IT básicos orientados a las pymes, relacionados con el mantenimiento del puesto de trabajo, los servidores o las redes. En 2013, la compra de Aventia les permitió adquirir un perfil de integración y, posteriormente, en 2019 con la adquisición de IPM dan un paso más allá del espacio del puesto de trabajo gracias al negocio que la compañía española desplegaba en el entorno de las infraestructuras críticas. “Todo esto nos ha permitido ir creciendo e ir consolidando la oferta”, explica.
En el análisis de la evolución del puesto de trabajo, Moreno recuerda que, tras la inversión, enorme, que se llevó a cabo durante la pandemia, en 2022 y 2023 las empresas comienzan a reflexionar, de una manera mucho más seria, acerca del modelo de trabajo híbrido. “Es necesario trabajar en la oficina; lo que requiere entornos de flexibilidad que aseguren el confort del empleado y que le permita trabajar de forma colaborativa”. A su juicio, todavía existe una gran oportunidad porque muchas empresas aún están definiendo este modelo híbrido o reemplazando las tecnologías que se adquirieron de forma reactiva hace años. “Tras la estabilización del trabajo híbrido, muchas empresas están definiendo cuál es el modelo definitivo”.
Ricoh cerró su año fiscal en Iberia el pasado 31 de marzo, con una facturación de 384 millones de euros, un 4,4 % más que el año anterior
Ricoh cerró su año fiscal en Iberia el pasado 31 de marzo, con una facturación de 384 millones de euros, un 4,4 % más que el año anterior. En el análisis de su actual año fiscal, Moreno observa un crecimiento más moderado, que ha permitido a la compañía racionalizar los servicios y los negocios, lo que ha mejorado el beneficio en todas sus líneas.
Elemento destacado de la estrategia en España es la factoría con la que cuentan en Madrid, enfocada a la automatización de procesos. Es un caso de éxito. “En 2007 iniciamos nuestra estrategia en la gestión documental y en la automatización de procesos y en 2015 dimos un salto cualitativo, especialmente en el mundo de la pyme en España”, explica. Poco después, Ricoh decidió ordenar e industrializar estos procesos, a través de una metodología, con una gestión ágil, lo que derivó, posteriormente, en la creación de la factoría. “Nos ha permitido escalar a otros países y a otras tecnologías”.
En su compromiso con el canal, el pasado mes de octubre se presentaba un nuevo programa de canal, Ricoh Unity Partner Programme, que repartía a los partners en cuatro categorías diferentes. El ecosistema de partners de la compañía en España está conformado por 100 distribuidores en España. “El canal es una de las principales apuestas de Ricoh”. Se trata de una iniciativa europea que canalizará, de una forma más ordenada, la inversión de la compañía en el canal. “Tenemos una oportunidad de crecer y de ayudar a los partners a hacerlo con nosotros”.
De cara a 2026, Moreno pone el acento en las oportunidades en torno a la ciberseguridad y a los procesos de tratamiento de los datos, básicos para la adopción de inteligencia artificial.




































































