La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) ha lanzado una nueva campaña mundial para concienciar a los consumidores sobre el negocio ilicito de productos falsificados que genera 250.000 millones de dólares al año. La campaña, que se denomina “Productos falsificados – no apoyes el crimen organizado”, está pensadas para informar al consumidor que al comprar productos falsificados puede estar financiando a bandas de delincuencia organizadas además de contribuir a otros problemas éticos o poner en peligro su propia salud.
Los productos falsificados son de diversos tipos y originan diversos problemas. Por ejemplo, desde una perspectiva medioambiental, al no existir normativas al respecto, existen muchas probabilidades de que sustancias químicas y componentes desconocidos usados en productos eléctricos falsos no tengan una gestión de residuos apropiada, causando graves daños al medio ambiente.
Yury Fedotov, el director ejecutivo de UNODC, explica que “en comparación con otros crímenes como el tráfico de drogas, la producción y distribución de productos falsificados presenta un negocio de bajo riesgo y alta rentabilidad para los delincuentes. La falsificación alimenta las actividades de blanqueo de dinero y propicia la corrupción. También existe evidencia de cierta participación o solapamiento con el tráfico de drogas y otros delitos graves.”
Según indica este organismo, los grupos criminales usan similares rutas y modus operandi para mover mercancías falsificadas que para realizar el contrabando de drogas ilícitas, armas o personas. En 2013, el programa conjunto de UNODC y la Organización Mundial de Aduanas “Container Control Programme” (CCP) detectó mercancías falsificadas en un tercio de los contenedores incautados, a pesar de que dicho programa se concibió inicialmente para interceptar drogas.