Promocionar la marca España no es cruzada nueva. Pero si lo llevan a cabo las multinacionales foráneas que operan en España sí que cobra un carácter especial. Reunidas bajo el paraguas de una asociación, ésta celebró su evento anual en el que presentaron el informe “Innovando el futuro”. “Una de las prioridades del Gobierno será seguir atrayendo la inversión de las multinacionales”, deseó Pedro Duque, ministro de ciencia, innovación y universidades, encargado de abrir la jornada. “Para ello no vamos a aumentar las subvenciones dedicadas a este tipo de empresas; muchas de ellas mucho más grandes que el Gobierno de España; sino que vamos a trabajar por potenciar el talento y por ofrecer una regulación que haga atractiva estas inversiones”. Toda una declaración de intenciones para un ministro, neófito pero completamente espontáneo en sus maneras, que desveló que va a hacer todo lo posible por “trasladar las ideas que traigo de la órbita espacial al espacio práctico”. Ahí es nada.
De los cambios que se están produciendo y de cómo se pinta el futuro habló María Luisa Melo, directora de comunicación y relaciones institucionales de Huawei en España y presidenta de la comisión de innovación de multinacionales por marca España. “Hay que seguir innovando el futuro desde el presente”, especificó. El informe, amplio, desgrana un ramillete de factores que deben ser tenidos en cuenta para entender cómo se está transformando la sociedad. “Afrontamos un futuro disruptivo, con cambios exponenciales y tremendamente significativos”, recordó.
Fiel a la empresa a la que pertenece, recordó el papel, imprescindible que tiene una buena infraestructura de red en el desarrollo de las TIC en este panorama innovador. “Las TIC no podrían desarrollarse sin una red de comunicaciones adecuada”. Unas redes en las que el despliegue del 5G es clave. “Supondrá un cambio de paradigma en las comunicaciones”. Melo recordó la excelente posición que presenta España en la implantación de la fibra óptica. “Somos el tercer país mundial, tras Japón y Corea en este terreno”. La red de España es la suma de la que exhiben, juntas, Alemania, Francia e Italia. “La fibra es el futuro de las redes”, pronosticó.
El informe destaca también el peso, creciente, que tiene la inteligencia artificial y su aplicación, real, en terrenos como la sanidad o los asistentes virtuales. “Vivimos en ciudades inteligentes y la robotización está presente en nuestro día a día”. No olvidó la referencia al desarrollo, imparable, de la industria 4.0 o la innovación que ha aterrizado también en el campo de la comunicación. “El usuario es cada vez más exigente y demanda una mayor personalización”. En este campo recordó que las últimas tendencias se refieren a la comunicación a través de hologramas o haciendo uso de la realidad virtual. En cualquiera de los casos, y ante esta avalancha de canales comunicativos, Melo recordó lo importante que es la creación y el mantenimiento de una marca personal. “Los que sean capaces de crearla ejercerán el liderazgo”.
No olvidó las predicciones. “En 2030 prevalecerá el transporte eléctrico y autónomo”. Un año en el que los hogares, seguros, sostenibles y saludables, estarán habitados por una o dos personas. “Y los drones formarán parte de nuestra vida. Ya han desbordado su uso en el ámbito militar para llegar a los lineales de las tiendas”.
La educación es materia troncal de estos cambios. “Hay que abordar un cambio en la educación, tanto en lo que afecta a las disciplinas a impartir como a la manera de impartirlas”. E insistió en que el talento digital “es un factor esencial de la transformación digital”.
Los sistemas de salud también deben transformarse. “La innovación ya no compete a los grandes centros: se ha extendido hasta los pequeños laboratorios o centros más pequeños”.
Mucho camino por recorrer
Andrés Pedreño, catedrático de economía aplicada y experto en emprendimiento y economía digital, se encargó de materializar la realidad en España. “Tenemos condiciones para ser un gran país digital pero debemos superar algunas restricciones importantes”, arrancó. Restricciones que tienen que ver con que no se aprovecha el volumen de inversiones en banda ancha, que además es cara; con un elevado proteccionismo y con políticas defensivas.
Pedreño recordó que España no se encuentra entre los 20 países mejor preparados para la nueva economía digital. “No contamos con una política estratégica ambiciosa en materia de IoT, gestión del dato o inteligencia artificial”. España, a su juicio, cuenta con un ecosistema digital débil. “La sobrerregulación sobre los datos, elemento básico de lo digital, supone un freno al desarrollo”.
Respecto al emprendimiento, recomienda mimar a las startups, “un tejido débil en España”. Y recordó el déficit y las numerosas vacantes que existen en los empleos digitales. “El partido digital se gana con el talento”. Para ello, la educación es clave. “El pensamiento computacional debe estar presente desde los primeros ciclos educativos: en primaria y en secundaria”. También es fundamental “la hibridación multidisciplinar”.
Hizo un repaso a los sectores claves de esta transformación: la banca, el turismo, la sanidad, la construcción y la industria 4.0. Por ultimo recomendó la necesidad de que los economistas realicen técnicas prospectivas. “Ser líder en la economía digital supone ser capaces de anticipar los cambios”.