Lenovo ha inaugurado oficialmente en Ullo, Hungría, su primera fábrica propia en Europa. El centro tendrá el foco principalmente en la producción de infraestructura de servidores, sistemas de almacenamiento y estaciones de trabajo de alta gama para clientes de toda Europa, Oriente Medio y África.
La fábrica, que ya cuenta con más de 1.000 trabajadores a tiempo completo en varios puestos de ingeniería, gestión y operaciones, supone la expansión de las operaciones de producción internacional de Lenovo. El fabricante espera que la plantilla del centro fabril continuará incrementándose a medida que la planta llegue a su plena capacidad de producción.
“Con la apertura oficial de nuestra fábrica en Hungría, hemos alcanzado un hito muy significativo en la optimización y evolución de nuestra red de fabricación global. La ubicación perfectamente conectada de Hungría nos sitúa mucho más cerca de nuestros clientes europeos, lo cual nos permite prestar apoyo y responder a sus necesidades, al tiempo que nos mantenemos a la vanguardia de la innovación. A medida que nuestro negocio continúa creciendo en todo el mundo, esta fantástica nueva planta desempeñará un papel clave en nuestros planes para garantizar el éxito de cara al futuro y nos permitirá ofrecer tecnología inteligente a toda Europa de un modo más sostenible, rápido y eficiente”, explica François Bornibus, vicepresidente Senior y presidente de la Región EMEA de Lenovo.