La consultora calcula que tras la caída del 2,7 % con la que concluyo 2017, el mercado que engloba como dispositivos personales (ordenadores de escritorio, portátiles, estaciones de trabajo, tabletas y detachables) caerá hasta el 3,5 % en 2018. En una proyección a más largo plazo, IDC calcula que su decrecimiento anual se situará en el 1,5 % en los próximos 5 años.
Dentro de este entorno PC, los convertibles y los equipos ultradelgados, así como los detachables mantienen su bienestar: se espera que las tres categorías de productos crezcan año tras año. Ryan Reith, vicepresidente de programa de Worldwide Quarterly Mobile Device Trackers de IDC, insistió en que el foco de los fabricantes está en torno al desarrollo de los dispositivos premium, los equipos de gaming, los convertibles y los equipos delgados y ligeros. “Los tabletas desmontables son otra área que ha experimentado un crecimiento”, explicó. “Sin embargo, las oportunidades de negocio en torno lal mercado de los portátiles han eclipsado el desarrollo del segmento de los detachables».
Las tabletas, que alcanzaron su techo máximo como segmento de mercado en 2014, han estado en declive desde entonces. IDC calcula que su decrecimiento anual se sitúe en un 6,2 % en los próximos 5 años. El consumidor se decanta más por el teléfono inteligente y por optar por ciclos de vida de los productos más en línea con los PC tradicionales.
Los PC de sobremesa también caerán: exactamente una tasa anual del 2,6 % en los próximos cinco años. Un apartado en el que la demanda del segmento profesional tira más que el consumo a pesar de que en este último, el entorno del gaming sigue como punta de lanza del crecimiento: ahora bien, los jugadores se decantan más por los portátiles.
«A pesar del descenso continuado de los PC de sobremesa, el gaming supone muchos cambios en el diseño y el formato de este tipo de equipos; lo que abre oportunidades a las marcas», asegura Jitesh Ubrani, analista senior de investigación de IDC. «Los consumidores valoran cada vez más los formatos de forma pequeños y ultrapequeños en este apartado junto con componentes más pequeños como tarjetas gráficas. Esto, unido a los distintos perfiles de jugadores. se traduce en un cambio en el diseño de estos PC de escritorio que han pasado de las enormes torres de antaño a formatos más pequeños y elegantes».