En 2001, España fue el primer país europeo donde recabó Huawei. Quince años después la compañía china exhibe una enorme implantación en nuestro país a través de sus tres grandes fortalezas: el mercado de las operadoras, donde reside su máximo potencial; el desarrollo del mundo de la empresa (a través de la división Huawei Enterprise) y el entorno del consumo, en el que ya se han convertido en la segunda marca en el mercado español de los teléfonos inteligentes. Tres lustros que la compañía decidió celebrar la noche del pasado 12 de diciembre, reuniendo a clientes y socios en el Palacio de Cibeles, en Madrid.
Gou Ping, vicepresidente y CEO rotatorio de Huawei, resaltó que en estos 15 años la compañía ha creado empleo y ha invertido en talento, clave para poder seguir creciendo. “Estamos liderando la transformación digital”, afirmó. Ping insistió en el ecosistema que forman los socios y los clientes de la compañía a los que agradeció su apoyo y a los que señaló como la clave en el camino de innovación que la marca ha recorrido en España. El CEO rotatorio recordó el capital humano de Huawei, integrado por 1.000 empleados en España, a los que se une la creación de otros 2.000 empleos indirectos.
Lyu Fan, embajador extraordinario y plenipotenciario de la República Popular China en España, recordó que a pesar de la enorme distancia que separa a China de España, “siempre hemos mantenido buenas relaciones económicas y comerciales”. Fan apuntó el crecimiento que se observa en la balanza comercial de ambos países (que ronda los 20.800 millones de dólares) y en las exportaciones españolas a China (alrededor de 4.500 millones en los nueve primeros de este año, lo que supone un ascenso del 3,4 %). El diplomático deseó que la empresa siga creciendo en el mercado español. Además, recordó la apuesta de Huawei por la formación de talento en las nuevas tecnologías.
El acto contó con la participación de Álvaro Nadal, ministro de energía, turismo y agenda digital, que fue el encargado de clausurarlo resaltando el papel que tiene la revolución digital en la constitución de la sociedad y en el desarrollo económico. “Lo digital va a determinar nuestro modelo de vida futuro y la economía estará relacionada absolutamente con ello”.
El ministro recordó los cinco aspectos claves que deben formar parte de la agenda digital. “La infraestructura se constituye en la base de todo”, arrancó. “Aunque lógicamente no representa todo el sistema digital”. Nadal aseguró que España está a la cabeza de Europa en el desarrollo de infraestructuras y es líder en banda ancha móvil. “Sin la inversión de las operadoras y de empresas como Huawei esto no hubiera sido posible”. Junto a la infraestructura, resulta fundamental el desarrollo de nuevos modelos de negocio y de servicios; un apartado en el que la tecnología resulta clave y en el que, reconoció, “Europa no está aún muy avanzada”.
El individuo es un elemento troncal en la agenda digital. “Es fundamental el desarrollo de los derechos de la persona en la red, lo que incluye el respeto a su intimidad, la inclusión de una publicidad honesta, el derecho a una información veraz y el cuidado de los menores”, enumeró. “Se ha avanzado poco en este campo”, reconoció, apelando a la redacción de una constitución digital que vele por los derechos digitales de los ciudadanos. Por último apuntó la urgencia de definir los derechos de propiedad en la red y un sistema tributario que entienda este entorno digital.