Se constituyen en los primeros miembros de la serie K de LG, una familia Premium adaptada a los usuarios más jóvenes. Especialmente pensada para la creación y el consumo multimedia, el K10 disfruta de pantalla de 5,3” mientras que el K7 se alarga hasta las 5”.
Las cámaras son prioritarias: el K10 cuenta con un dispositivo de 13 megapíxeles en la parte posterior y 8 en el frontal. El modelo hermano exhibe una trasera de 8 megapíxeles y 5 en la frontal. Los dos dispositivos están equipados con Flash para Selfie en el frontal.
Corren ambos con Android 5.1 Lollipop y es posible optar por dos capacidades de almacenamiento: 16 y 8 GB.