Luis Pardo, flamante CEO de Sage en España, lo tiene claro: todas las aplicaciones se irán a la nube y los clientes gestionarán su negocio bajo esta fórmula (modelo de suscripción lo llaman en Sage) en un futuro. “Todo irá a este modelo pero lo hará al paso que marque el cliente”, aseguró. Y la razón, aparte de las ventajas que esta opción supone para el cliente, es que el mercado va hacia allí. “No lo dice Sage”, repitió. “Y es el cliente quien decide cómo y cuándo”.
Los números avalan esta subida, razonada, a la nube. Pardo aseguró que en España el 80 % de los nuevas microempresas que han adoptado las soluciones de Sage lo han hecho optando por el un modelo de suscripción. A nivel mundial este negocio creció un 28 % en su último año fiscal (400.000 nuevos clientes le dijeron sí); un porcentaje que encuentra una plena sintonía con lo que ha sucedido en España, con un crecimiento similar. “Nuestro país es uno de los países en los que más desarrollado está este modelo de suscripción”, aseguró. De cara al año que viene la empresa pretende elevar los ingresos de software a través de este modelo un 50 %, que se eleva hasta el 114 % si se trata de las microempresas. “Nuestra fuerza y nuestra fortaleza es el modelo de suscripción”, entonó. Una fortaleza que no va a decapitar, de la noche a la mañana, el modelo tradicional que sigue teniendo mucho peso en su facturación. “La fecha de caducidad de este modelo la pondrá el mercado”, aseguró. “Ahora bien, es un modelo que ya no cuenta con ninguna ventaja en relación a la fórmula de suscripción”.
Sage extiende todo su catálogo a la nube. Ahora el modelo de suscripción abarca desde los 10 euros al mes que cuesta Sage One, su ERP para los autónomos y las microempresas, hasta los 600 euros mensuales que representa su joya para las medianas y grandes, el ERP X3.
La digitalización, obsesión
Inmersa en un mercado, siempre competitivo, como es el software empresarial, Pardo señala lo que a su juicio es la principal baza diferenciadora de Sage. “Somos los únicos que damos soluciones desde el autónomo hasta una empresa del Ibex35”. La defensa de la innovación, “que no es un lujo, es un básico” y, sobre todo, la obsesión por la digitalización de la empresa, lo que incluye a las pymes. “Es clave para su competitividad, la creación de empleo y el crecimiento”.
2.600 socios configuran la estructura de canal de la marca en España, generando en torno al 35 % del negocio que desarrolla. Unos socios que tienen también que girar su negocio hacia la nube aunque ahora el reparto entre los que siguen aferrándose al modelo tradicional y los que empiezan a apostar por la suscripción se sitúa en el 50 %. “Hay algunos que siguen orientados al producto no al cliente”, asegura. “Pero, sin duda, los que ya están desarrollando este nuevo modelo, lo están haciendo muy bien y además aseguran la fidelidad de los clientes y disfrutan de una mayor recurrencia en su negocio”.
En este ecosistema de socios, Pardo destaca el peso que están adquiriendo, por ejemplo, los ISVs, “que permiten el crecimiento de las soluciones de manera muy especializada” y los que están desarrollando un foco importante en los servicios.
Buenos resultados en España
En la clasificación europea, España se coloca como la tercera área más importante. La marca cerró ejercicio fiscal el pasado 30 de septiembre, con un crecimiento a nivel mundial que se situó en un 5 % y un objetivo para el año en curso que se coloca en el 6 %.
En España, la elevación se colocó en un 1 %. Pardo asegura que, a pesar de lo que pueda parecer la cifra, el crecimiento fue muy importante. “Hay que tener en cuenta el peso, creciente, que va tomando en nuestro negocio este negocio de la nube, por tanto los ingresos se reparten, de manera recurrente, a lo largo de los meses”. Sin dar cifras concretas, aseguró que en el primer semestre fiscal, que concluyó el pasado mes de marzo, “el crecimiento es mucho mayor”.
La empresa anunció la celebración el próximo mes de julio, entre los días 27 y 30, de su primer Sage Summit a nivel mundial que tendrá lugar en Nueva Orleans.