El reciente ciberataque masivo DDoS contra empresas tecnológicas en Estados Unidos ha puesto de manifiesto el peligro que lleva aparejado el desarrollo del Internet de las cosas. Este ataque se ha producido aprovechando una vulnerabilidad de cámaras instaladas en centros públicos a través de una bonet que se aprovechó de esa brecha de seguridad para lanzar el ataque. Este hecho abre el debate sobre los problemas de seguridad de las cosas conectadas a Internet. Los expertos en seguridad aconsejan que los fabricantes de estos dispositivos eliminen las contraseñas por defecto y que garanticen que se puedan actualizar de manera remota y automática contra las amenazas. Al mismo tiempo, aconsejan a los usuarios de los dispositivos inteligentes que se conectan a Internet como televisores, luces, termostados o sensores que cambien la contraseña que viene por defecto a una contraseña más segura.
¿Protege sus dispositivos conectados? ¿Está tomando medidas para proteger estos aparatos inteligentes?
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