Intel ha presentado su nueva plataforma para mejorar la infraestructura de los centros de datos y ofrecer a las empresas un mayor rendimiento y productividad. La nueva familia de procesadores escalables Intel Xeon cuenta con una arquitectura diseñada para responder a las necesidades actuales de los centros de datos.
Navin Shenoy, vicepresidente ejecutivo y director general del data center group de Intel, explicó que «las infraestructuras de centros de datos y redes están experimentando importantes transformaciones para responder a los nuevos casos de uso, como la medicina de alta precisión, inteligencia artificial y servicios de red ágiles que están allanando el camino hacia las redes 5G». Por este motivo, Intel ha incluido en su nueva plataforma un conjunto de tecnologías para satisfacer estas nuevas necesidades. Estas novedades incluyen la arquitectura Intel Mesh, Intel QuickAssist, Intel Optane SSDs e Intel Omni-Path Fabric. Ademas, las mejoras de rendimiento respecto a la generación anterior se promedian en 1.65X y para cargas de trabajo como la AI, los procesadores mejoran el rendimiento hasta un 2,2x.
Esta nueva familia llega también a ofrecer hasta 4,2x más sistemas virtuales13 (VMs) frente a un sistema con cuatro años de antigüedad, lo que representa una mejora del 65 % en el coste total de adquisición (TCO).
Por todas estas características, estos procesadores «representan el mayor avance para centro de datos de la última década», añadió Shenoy.