Insiste la marca china con el Yoga. Su conocida familia de tabletas cuenta ahora con dos nuevos miembros: un Yoga de 8” y 404 gramos de peso y otro, de 10”, que supera por poco los 600 gramos. Un dúo que copia, con exactitud, las posibilidades de torsión del Yoga original: es posible cogerlas como si se llevara un libro —dispone de un asa cilíndrica—; colocarlas, de pie, sobre una mesa; o reclinarlas para escribir, jugar o navegar en la pantalla.
Ambas alargan la duración de sus baterías hasta las 18 horas y que dispone de dos motores, a elegir, ambos de cuatro núcleos: MT8125 o MT8389 —en esta caso en el modelo 3G—, con 16 o 32 GB de capacidad. La pareja opta por el sistema Android 4.2.
La relación de cámaras es idéntica en los 2 tamaños: la trasera, de 5 megapíxeles, con enfoque automático; y la frontal, con ranura micro SD que permite hasta 64 GB de almacenamiento. Las conexiones incluyen wifi y 3G —opcional—, un conector micro USB y compatibilidad con Dolby DS1. En el modelo de 10”, la marca ofrece teclado Bluetooth opcional, que actúa como cubierta.
