El 71 % de las empresas se ve obligado a evolucionar o replantearse su modelo operativo de datos y analítica debido al impacto que están tenido tecnologías disruptivas como la inteligencia artificial. Esta es una de las principales conclusiones de un informe de Gartner que trata de arrojar luz sobre la percepción de los CDAO sobre el futuro y los retos a los que se enfrenta.
Según Gartner, los CDAO “no pierden el tiempo a la hora de realizar cambios en su modelo operativo” y están adoptando estrategias innovadoras, “basadas en datos” con el fin de acelerar la agilidad organizativa”.
Y para muestra, un botón. Un 38 % de los CDAO encuestados destaca que su arquitectura de analítica y datos va a ser revisada en los próximos 12 o 18 meses,
y adoptará y aplicará políticas, prácticas y normas de gobernanza.
Además, estas figuras, cada vez más críticas para las empresas, están ampliando sus responsabilidades “a medida que las limitaciones presupuestarias y de recursos se convierten en un problema aún mayor”.
Entre las responsabilidades clave del CDAO se encuentran la gestión de la estrategia de datos y analítica (74 %) y la gobernanza (68 %). Ser responsable de la IA también ocupa un lugar destacado en la agenda del CDAO. La encuesta revela que para el 49 % de estos la IA generativa (GenAI) se encuentra dentro de su ámbito de responsabilidades principales. La IA está dentro del alcance del 58 % de los CDAO, lo que supone un aumento con respecto al 34 % de 2023.
La ampliación de responsabilidades conlleva un coste significativo para los CDAO, con un 46 % señalando a la limitación presupuestarias como un reto. «Los CDAO que presentan mejores casos de negocio a los CFO reciben una financiación mejor y más rápida para sus iniciativas de datos y analítica”, explica la consultora. “También obtienen una mayor aceptación por parte de los ejecutivos, lo que se traduce en una reducción de costes».
Los CDAO necesitan aumentar su poder e influencia para hacer que las cosas sucedan. También deben comprender las palancas de valor y los puntos débiles de la organización de principio a fin para mostrar su valor a la junta directiva. «De lo contrario, en 2026, el 75 % de los directores de desarrollo de negocio que no consigan hacer de la influencia en toda la organización y el impacto medible su principal prioridad, serán asimilados a funciones tecnológicas”.