La marca ha lanzado una batería de productos que dan un paso más en su estrategia de lograr que las compañías implanten un sistema de backup “consolidado, centralizado y convergente, perfectamente integrado con las aplicaciones críticas y tendente hacia los servicios”, apuntó Jesús Velasco, account manager de la división de BRS de EMC en España.
El objetivo es claro pero el panorama empresarial a “centralizar” se torna complejo. “El backup se ha colapsado”, sintetiza Velasco, que desgrana la situación: “Los sistemas de backup se tornan en una arquitectura accidental, el que cada entorno —las aplicaciones críticas, bases de datos, servidores físicos o virtuales, etc.— gestiona y hace un backup de sus datos, con una arquitectura difusa integrada por islas distribuidas; sin contar con un sistema de protección global”. Se impone, por tanto, respetando la organización y protección de cada entorno, un “paraguas” global que incluya una gestión completa, la integración de las aplicaciones y los servicios.
Batería de productos
Para lograrlo, la marca ha extendido su oferta de la gama Data Domain, integrada por los sistemas DD2500, DD2400, DD4500 y DD7200, que presentan una mayor integración con las aplicaciones de archivado y, sobre todo, con aplicaciones críticas de SAP y Oracle. Velasco aseguró que presentan una mayor velocidad que sus predecesores —4 veces más rápidos— y son 10 veces más escalables.
La marca también ha mejorado las capacidades de su suite Data Protection Suite, que ha mejorado sus funcionalidades en los entornos virtuales. Por último se han reforzado los servicios en la nube, Mozy by EMC, con una mayor facilidad en el escalado de backup en la nube, reduciendo los costes.
Jesús Velasco ve mucho recorrido a este tipo de soluciones, tanto en el entorno de las grandes empresas como en el apartado de las pymes. “Es un segmento en el que hay mucho por hacer y puede estar creciendo en torno al 10 ó 15 % cada año”. En relación a la “batalla” entre el disco y la cinta en el mercado del almacenamiento, Velasco cree que las cintas van a ser desterradas de estos entornos. “Hay recursos para sacarlas de las compañías”, aseguró. “Los clientes viven mejor sin cintas; el disco es más rápido y seguro”.
